Juan Lladró recibe a título póstumo ‘La Llave’ del Casal de la Pau

La asociación que ayuda a personas reclusas y expresidarios en situación de vulnerabilidad reconoce también la labor de la voluntaria Carmen Mustieles y de la organización Novaterra

Juan Molpeceres, actual presidente del Casal de la Pau, y José Antonio Bargues, su fundador, junto a algunos de los voluntarios y una de las homenajeadas.

Juan Molpeceres, actual presidente del Casal de la Pau, y José Antonio Bargues, su fundador, junto a algunos de los voluntarios y una de las homenajeadas. / Levante-EMV

Con motivo de la conmemoración del 50 aniversario del Casal de la Pau, Juan Molpeceres, actual presidente de la asociación tras una larga trayectoria en el servicio jurídico de la entidad, y José Antonio Bargues, fundador y presidente honorífico de la misma, entregaron ayer ‘La Llave del Casal” a personas y entidades que durante estas décadas han mostrado un apoyo incondicional a la asociación. Un apoyo a veces callado pero infinitamente necesario para poder brindar el mayor número de oportunidades a las personas que, tras salir de prisión, se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad, muchas veces a causa de enfermedades, adicciones o falta de red familiar.

En un sencillo acto que tuvo lugar ayer jueves día 15, en la sede del Casal de la Pau de la calle d’En Llopis, recibieron su merecido reconocimiento - simbolizado por una llave - Juan Lladró a título póstumo (que recogió su hermana), la religiosa y voluntaria Carmen Mustieles, (a quien le fue entregado en su comunidad religiosa) y la Fundación Novaterra.

En palabras del presidente de la entidad, Juan Molpeceres, “celebrar 50 años no nos hace estar especialmente satisfechos, pero tampoco darnos por vencidos; es una etapa más para seguir en el camino que inició José Antonio, un camino que inició él solo hace 50 años. Un camino largo, a veces a oscuras, con piedras y tropiezos, pero a la vez muy fructífero gracias al apoyo que hemos podido prestar a personas con problemas jurídico penales que no tienen apoyo familiar ni recursos económicos”. “Hace tiempo que ya no andamos solos, gracias al papel del voluntariado, entidades y empresas que ahora nos acompañan”, indicó Molpeceres.

Como dice su fundador, José Antonio Bargues, “cuando todo falla, ahí está el Casal, y esa es nuestra razón de ser”. Fue en el año 1972 cuando Bargues fundó la Asociación Domus Pacis – Casal de la Pau, una entidad de voluntariado que nacía con la misión de dar salida viable a personas jóvenes que a veces, después de haber pasado por reformatorios, ingresaban en centros penitenciarios como consecuencia de delitos relacionados con sus evidentes carencias de socialización.