Catalá y Mazón irán a por la Copa del América tras la edición de Barcelona

La alcaldesa de València, María José Catalá, y el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, han confirmado su deseo de traer la Copa del América a València después de la celebración de su última edición en Barcelona y las dudas que hay en esa ciudad acerca de repetir como sede de la que está considerada la regata más antigua del mundo. Catalá aseguró que «es un tema que trabajamos tranquilamente, prudentemente», y que es «coherente» con la política turística que quiere para la ciudad». Es más, hizo una llamada al sector privado para implicarse en este proyecto más allá del impulso que puedan darle las administraciones. Mazón, por su parte, dijo que València es la «casa natural» de esta competición y que hará «todo lo posible» para que vuelva.

Como ha venido contando este periódico, la victoria del Emirates New Zealand facilita la vuelta de la Copa del America a València después de haberla acogido ya en los años 2007 y 2009. Su gerente, Grant Dalton, ya lo intentó para esta última edición, la 37, pero el anterior alcalde, Joan Ribó, la desestimó por el elevado canon que había que pagar: alrededor de 80 millones de euros. Además, en la ciudad de Barcelona hay muchas dudas acerca de la conveniencia de seguir acogiendo este evento. El propio alcalde, Jaume Collboni, ha dicho que tomará una decisión después de analizar los resultados de esta edición.

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"Un acontecimiento con ventajas"

Ahora, por tanto, con nuevo gobierno municipal y dudas en Barcelona, la ciudad de València puede volver a la carga. Y así lo confirmó ayer la alcaldesa María José Catalá. «Nosotros pensamos que es un acontecimiento que en su día reportó ventajas a la ciudad y vamos a trabajar para recuperarla. Ya lo dije en campaña, los anteriores gobiernos, tanto autonómico como local, bajaron los brazos y perdieron la oportunidad en beneficio de Barcelona, que ha hecho unas instalaciones y que evidentemente ahora es un competidor que no existía», dijo.

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Respecto a la polémica sobre seguir aumentando el turismo o controlarlo, Catalá explicó que la Copa del América «es un evento que hizo que muchos de los integrantes de los equipos se vinieran a vivir a València». «No es, por tanto, un turismo puntual, sino que tiene un impacto permanente en el tiempo. València en lugar de apostar por un turismo low cost, un turismo de horas, que no genera un gran impacto sobre la ciudad, tiene que apostar por un turismo especializado, de calidad, que genere impacto a la ciudad y dentro de esa estrategia veo absolutamente coherente nuestra apuesta por la Copa del América».

Catalá tampoco ve problemas en la financiación del evento, un asunto capital en las ediciones valencianas de 2007 y 2009, que costaron 400 millones a la ciudad que nunca se recuperaron y que tuvo que asumir el Gobierno Central. A su juicio, «las cosas cambian y nosotros siempre trabajamos con la presencia de patrocinadores privados. Las administraciones tienen que impulsar, pero si hay un rédito económico, el sector privado también tiene que ayudar», dijo.

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Por su parte, Mazón aseguró que hará «todo lo posible» por que la Copa del América vuelva a València, «la casa natural» de la competición. «Ya he dicho que he hecho, hago y haré todo lo posible para que la Copa América vuelva a su casa natural, que es València, y que incomprensiblemente el expresident Ximo Puigy el exalcalde Joan Ribó dejaron escapar», manifestó. «No me voy a rendir con esta cuestión», concluyó.

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