Aparecen dos patios islámicos con canales de agua en las obras de las viviendas para sacerdotes de la calle Salvador
Los arqueológos sacan a la luz el sistema de rotondas, canales, andenes y columnas de lo que pudo ser un edificio notable de época islámica

Restos de los patios islámicos porticados hallados en la calle Salvador, donde se aprecian los canales, andenes y pilares / M.A.MONTESINOS
Las obras de la residencia para sacerdotes de la calle Salvador que proyecta el Arzobispado han dado con los restos de dos patios de época islámica. En las excavaciones que se han realizado tras el derribo del edificio ruinoso existente y previas a la nueva edificación han aflorado parte de dos patios islámicos, con andenes y canales de agua y rotondas semicirculares en las esquinas.
En València se han localizado fuentes de «aliceres» con esmaltes en turquesa, blanco o negro en la antigua plaza de la Figuereta, en la almunia de Abú Zayd (bajo el Palacio Real), en la calles de la Paz y Viciana y en el Centro del Carmen. En la Bajada de San Miguel, en el Carmen, apareció un patio mudéjar donde se conservaba en buen estado una de las fuentes en forma de estrella y decorada con azulejos. Por la tipología y decoración de la fuente correspondería a una vivienda de cierta importancia, perteneciente a un musulmán de cierta posición de la ciudad islámica de Valencia (Balansiya) trasladado a la morería tras la conquista.
Otro ejemplo notable de la arquitectura del agua islámica afloró en la calle del Mar, en las excavaciones previas a la rehabilitación del Palacio de los Valeriola, actual Centro de Arte Hortensia Herrero. Las excavaciones arqueológicas que se llevaron a cabo desde 2017 en este palacete, dirigidas por Tina Herreros, dieron con lo que expertos en el periodo islámico como el arqueólogo Vicent Lerma definieron como la «pequeña Alhambra valenciana». En el patio del palacio, donde también se han recuperado e integrado en la exposición 36 metros del muro occidental de cinco metros de anchura del circo romano, aparecieron los restos de lo que podría ser una vivienda palaciega de época islámica, con una gran alberca, de cinco metros de largo, dos fuentes en forma de estrella en los extremos decoradas con azulejos de cerámica vidriada de colores, entre los que destaca el azul turquesa, y conectadas a través de un sistema canales y rotondas. La alberca se encontraba en un patio porticado (han aparecido los restos de los pilares, que contaba con vegetación). "El nivel de sofisticación» y dimensiones del patio islámico, con 380 metros cuadrados de superificie, sorprendió a los arqueólogos. Una de las fuentes se exhibe en la exposición del centro de arte.

Fuente mudéjar con forma de estrella y esmaltada hallada en las excavaciones de la Bajada de San Miguel, en el Carmen / M.A.Montesinos
El Arzobispado de València proyecta una residencia para los sacerdotes de los edificios eclesiásticos del centro de la ciudad, como la Basílica o los Santos Juanes, en el solar de su propiedad situado en el número 2 de la calle Salvador, frente al solar de la frustrada ampliación de las Corts, donde también se llevó a cabo una excvación que localizó los restos de la muralla y un torreón de la muralla romana. El Arzobispado recibió en junio de 2023 licencia en el Ayuntamiento de València para las obras de la residencia. La licencia llega después de años de abandono del solar y de que la Concejalía de Desarrollo Urbano abriese en noviembre de 2021 un expediente de ruina previo a la inclusión del terreno en el Registro de Solares sin Edificar, primer paso para la expropiación por abandono e incumplimiento del deber de edificar.
El ayuntamiento envió al propietario de dicho solar de apenas 97 m2, adosado a la Iglesia del Salvador, y con edificabilidad para cuatro alturas, orden de construcción tras haber transcurrido dos años desde la aprobación del plan especial de Ciutat Vella. El Arzopispado a principios de 2022 el proyecto para una nueva residencia para sacerdotes que cuenta con la aprobación preceptiva de la Dirección Territorial de Cultura. El nuevo edificio tendrá tres alturas, planta baja y garaje, así como trastero en la cubierta. Por las reducidas dimensiones de la parcela solo cabe una vivienda de dos habitaciones por planta. El proyecto de la nueva residencia lo firma Jaime Aloy, uno de los arquitectos de cabecera del Arzobispado, que diseñó entre otras la iglesia de las Naves de la Cross.
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