València: La oposición rechaza la opción del "voto en contra" de los presupuestos participativos

Los vecinos estudian la nueva propuesta y piden, en cualquier caso, que los proyectos que se aprueben se ejecuten

El proyecto de "arcos chinos" para la calle Palayo fue uno de los proyectos más controvertidos.

El proyecto de "arcos chinos" para la calle Palayo fue uno de los proyectos más controvertidos. / F. Calabuig

José Parrilla

José Parrilla

València

Los presupuestos participativos presentados la semana pasada por el equipo de Gobierno municipal de València han generado rechazo o dudas entre los partidos de la oposición, especialmente por la opción de poder votar en contra de los proyectos. Los vecinos, por su parte, se han dado un tiempo para analizar el nuevo procedimiento introducido por el PP, pero lo que más les preocupa, independientemente de la fórmula utilizada para la elección de las propuestas, es que se ejecuten. La concejala Julia Climent aseguraba el viernes pasado que el anterior gobierno dejó pendientes 259 proyectos, de los cuales aún quedan un centenar por hacer.

Los nuevos presupuestos participativos, que destinan 16 millones de euros para 2025 y 2026, tienen como novedad la posibilidad de votar en contra de las propuestas ciudadanas en la última fase de la tramitación, así como la opción del voto presencial. También establece un mínimo de 100 apoyos para entrar en el debate.

Rechazo socialista

La concejala socialista Elisa Valía cree que el PP de María José Catalá ha «cumplido su amenaza» y ha empezado a «destrozar» los presupuestos participativos que puso en marcha el anterior gobierno progresista. «El Partido Popular ha comenzado el derribo de los presupuestos participativos, tal y como confirmó hace unos días el gobierno de Catalá. Según anunciaron, se va a poder votar en contra en la próxima edición. Es decir, que cualquier persona va a poder bloquear proyectos en barrios que ni tan siquiera son el suyo», dijo.

«No es aceptable construir una participación ciudadana enfrentando a vecinos y vecinas y permitiendo que se bloqueen proyectos. Un barrio puede quedarse sin espacio público recuperado porque alguien que no es del barrio quiere atravesarlo en coche. Es una situación que no es de recibo», insistió.

La concejala socialista ha denunciado que, además, «se priva a los 18 barrios menos poblados de la ciudad a optar a la reserva de presupuesto de 3 millones de euros que tenían para no tener que competir con barrios con mucha más población. Esto es fundamental, puesto que, con la misma movilización, los barrios con menos población no tienen opciones y esto supone una frustración que hace peligrar el mecanismo de participación». 

Dudas con el voto presencial

Elisa Valía, igualmente, ha señalado que la imposición del PP de introducir el voto presencial presenta «serios problemas de garantías». «No nos explican cómo van a garantizar la transparencia y la seguridad en el proceso de votación y eso es algo que nos preocupa muchísimo y que nos hace temer lo peor», ha manifestado.

Finalmente, la edil socialista ha subrayado las «sospechas» que está generando cada detalle que el PP de Catalá va ofreciendo sobre el nuevo sistema de participación del Decidim. «Cada paso que dan y cada modificación que introducen confirma que María José Catalá no cree en la participación ciudadana y que va a desmontar todos y cada uno de los instrumentos que tanto había costado poner en marcha para hacer partícipe a los vecinos y vecinas de las mejoras de sus barrios, porque son quienes mejor conocen la situación y las necesidades de sus calles».

Dudas en Compromís

«Los presupuestos participativos del PP son la nueva chapuza de este gobierno incompetente y malfaener liderado por María José Catalá». Así se ha referido, por su parte, la concejala de Compromís Lluïsa Notario a la nueva propuesta del PP. «Desde Compromís llevamos más de un año denunciando la eliminación de los Decidim Vlc, pidiendo una partida mínima de 16 millones de euros, exigiendo un mecanismo equitativo en todos los distritos y transparente. Durante estos dos años, Catalá ha usurpado a la ciudadanía y al movimiento vecinal un derecho a decidir sobre sus barrios. Y hoy nos encontramos con la presentación de unos presupuestos copia y pega del Decidim Vlc, utilizando incluso la misma web que ya existía y como nombre Valencia Participa https://valenciaparticipa.com/, el mismo nombre que desde Compromís hemos puesto al proceso alternativo que creamos para darle voz al vecindario y recoger sus peticiones», explica Notario. «Sólo una novedad -añade-, que ahora se podrá votar en contra sin límite, una medida muy sospechosa por otra parte. Todo esto confirma que el Partido Popular no tiene el más mínimo interés en impulsar la participación vecinal y que funciona por presiones. Sin previsión, plazos, ni dotación presupuestaria. Un brindis al sol sin contenido alguno», concluyó.

Los vecinos piden eficacia

Finalmente, María José Broseta, presidenta de la Federación de Asociaciones Vecinales de València, aseguró que hoy mismo reunirá a su directiva para tratar este asunto. De entrada, lo que pide es que los proyectos que salgan aprobados se ejecuten, cosa que no ha pasado con las anteriores ediciones de los presupuestos participativos de València.

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