Vuelven los arcos chinos de la Roqueta a los presupuestos participativos

"¿Dónde están los arcos chinos?" Con este interrogante va encabazada la propuesta ciudadana para instalar un gran arco chino en la Roqueta presentada, de nuevo, a los presupuestos participativos que impulsa el Ayuntamiento de València con la popular Mª José Catalá al frente. Vuelven así la controvertida propuesta que se formuló en los presupuestos ciudadanos de 2021, que finalmente, tras meses de discusión se desechó por la falta de consenso ciudadano y porque chocaba con el proyecto de carrer temático de la pelota que impulsaba la Fundació de la Pilota. 

Una nueva propuesta ciudadana, anónima, vuelve ahora sobre el tema y plantea "respetuosamente la instalación de un arco chino tradicional en el barrio comercial chino de Valencia, en reconocimiento a la riqueza cultural y la contribución de la comunidad china a nuestra ciudad".

Carriles bici y peatonalizaciones destacan en los primeros presupuestos participativos de Catalá

València, expone la propuesta de los arcos chinos, "es un referente de diversidad y convivencia, y el entorno de calle Pelayo y Convento Jerusalén, con su vibrante actividad comercial, gastronómica y cultural, es un reflejo de ello. Sin embargo, la falta de un símbolo visible como un arco chino, presente en otras ciudades del mundo, perpetúa una invisibilización de esta comunidad". "La ausencia de este reconocimiento, unida a actitudes que desestiman la identidad del barrio por motivos como la presencia de un pelotari, fomenta percepciones discriminatorias que no reflejan los valores de inclusión de nuestra ciudad", añaden

València busca una "solución" para situar los arcos chinos en Pelayo

Comunidad china invisibilizada

Un arco chino no solo embellecería el entorno urbano, sino que también "promovería el respeto, la integración y el orgullo por la diversidad cultural de València". "Este símbolo fortalecería el sentido de pertenencia de la comunidad china y atraería turismo cultural, beneficiando a toda la ciudadanía".

Por ello, instan al Ayuntamiento a "reconsiderar esta propuesta ya ganadora en otra edición de Decidim siguiendo ejemplos exitosos de ciudades como Nueva York, San Francisco o Londres". Todo, agregan, "por una Valencia más inclusiva".

La comunidad china valenciana y el Insitituto Confucio han reivindicado la señalización del barrio chino valenciano como "referente de la cultura china en la ciudad". El nuevo gobierno tendrá que pronunciarse ahora sobre la idoneidad o no de la propuesta. Una vez concluida la fase de propuestas y apoyos, llegará el estudio de viabilidad económica de los proyectos presentados por parte de los técnicos municipales a partir del 23 de junio.

La comunidad china quiere instalar un Arco de la Amistad en La Roqueta

Peatonalizar la calle Alicante tras las obras y el acceso al Botánic

El plazo para presentar propuestas a los primeros presupuestos participativos del gobierno de PP y Vox, muy crítico con el formato y el bajo nivel de ejecución de los presupuestos participativos del anterior gobierno progresista, arrancó el pasado 29 de abril. Entre las primeras propuestas que entraron en la web municipal destacaban los nuevos proyectos de peatonalización de calles y carriles-bici, de los que hizo bandera el anterior gobierno progesista y que el nuevo gobierno ha cuestionado y en casos revertido. En los últimos días se han incorporado nuevas propuestas de peatonalizaciones. Una de ellas para que la calle Alicante, cerrada al tráfico por las obras del cañón peatonal que ejecuta Ferrocarrils de la Generalitat, se convierta permanentemente en peatonal en el tramo que está la estación del Norte y la Plaza de Toros tras la finalización de las obras del túnel de conexión de las estaciones de metro. "Es una zona con algo valor turístico por los dos edificios que está rodeada y es un error que vuelva a pasar coches una vez finalizada las obras", argumenta la propuesta.

No es la única calle que aspira a ser peatonal en la nueva remesa de propuestas. En Extramurs, los vecinos proponen la peatonalización también de la calle Quart, desde Guillem de Castro hasta las Torres, con el objetivo de dignificar el acceso al Jardín Botánico que "está siempre lleno de coches estacionados en segunda fila".

Proponen incluir en los presupuestos participativos una estatua a la gestión de Mazón

La propuesta consistiría en ampliar el ancho de acera de la calle Quart en su tramo Sur entre Guillen de Castro y la calle Turia y plantar árboles, poner mobiliario urbano y ampliar las aceras de las cuatro esquinas. "Creo que esta intervención cambiaria completamente la experiencia del peatón que visita el botánico y crearía un entorno mucho más verde, saludable y agradable para los vecinos de esta zona y para los visitantes de la torre Quart"

Toboganes gigantes y horario para perros en las playas

Entre las nuevas incorporaciones a los presupuestos, la colocación de grandes toboganes en varios jardines de la ciudad, uno de ellos los Viveros. "Consideramos que la incorporación de estos toboganes supondría una mejora notable en la oferta de juegos infantiles del parque, ampliando las posibilidades de disfrute para niños y niñas de diferentes edades, y reforzando el carácter inclusivo, seguro y educativo de este espacio tan valorado por las familias valencianas".

También se proponen este tipo de dotaciones en Camins al Grao, concretamente, en la plaza Ascensió Chirivella, en la actualidad "una zona totalmente degradada". "Estas instalaciones tienen mucho éxito entre niños de todas las edades.

Prolongar la L10 hasta el Club Náutico y Pinedo, una piscina de verano en Malilla o colocar en cada barrio de Valencia un gran mural, visible, con la consigna #LimGoHome o #PeterVeteYa son otras de las propuestas añadidas en los últimos días. También habilitar tramos de las playas de Valencia  (Malvarosa y el Cabanyal) para suelta de perros en horarios restringidos por la mañana y noche (por ejemplo de 20 a 9 de la mañana) donde los dueños de los perros puedan pasear a sus perros siempre controlados. Ciudades como San Sebastián, Madrid, Barcelona, Bilbao, Vitoria o Zaragoza han regulado en sus ordenanzas municipales la posibilidad de que los perros estén sueltos en determinados parques y playas durante horarios específicos, apunta la propuesta. València solo dispone de una playa para perros autorizada, en Pinedo.