Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Malestar en el entorno de Catalá por la estrategia de los líderes provinciales del PPCV

Creen que el movimiento para 'dejarla fuera' le da más motivos para resistirse a relevar a Mazón

María José Catalá en Nueva York con Manolo Valdés.

María José Catalá en Nueva York con Manolo Valdés. / Levante-EMV

José Parrilla

José Parrilla

València

Dicen las encuestas que la favorita de los votantes para sustituir a Carlos Mazón al frente de la Generalitat Valenciana es la actual alcaldesa de València, María José Catalá. También lo cree la dirección nacional de la calle Génova, empezado por su presidente, Alberto Núñez Feijóo. De hecho, la dirección nacional del PP ha propuesto como sustituta de Mazón a la propia Catalá frente a la decisión de los presidentes provinciales de aupar a ese puesto al presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó.

Así las cosas, y a falta de que el partido anuncie una decisión final, María José Catalá sigue estando en las quinielas. Una petición expresa de Feijóo sería muy difícil de rechazar, ya sea en este momento de catarsis, ya sea a medio plazo como candidata en unas futuras elecciones autonómicas.

Otra cosa es lo que quiera la directamente afectada. En el entorno de la alcaldesa aseguran que Catalá no quiere ese puesto, al menos por ahora. Apenas lleva dos años en la alcaldía de València y tiene por delante un proyecto que puede ser, elecciones mediante, de largo plazo. Personalmente, tampoco es el momento más adecuado, con dos niños pequeños y una vida familiar que ya es difícil de sacar adelante con las funciones de alcaldesa. Y coger las riendas del partido en la Comunitat Valenciana y la Generalitat en un momento tan complicado como este no es el mejor de los escenarios para dar el salto.

El último movimiento

Ahora, además, la situación se ha complicado dentro del partido, algo con lo que nadie contaba. Los presidentes provinciales se reunieron el viernes pasado y decidieron pedir ser tenidos en cuenta y proponer como sustituto de Mazón a Vicent Mompó, presidente de la Diputación de Valencia. Lo han hecho cuando María José Catalá se encontraba de viaje oficial en Nueva York para negociar los pormenores del futuro museo Sorolla y el Espai Valdés. Y lo han hecho frente a la opción barajada en Madrid, que sería la propia Catalá. Para el entorno de la alcaldesa esto es un intento de dejarla fuera desde dentro del propio partido, menoscabar sus posibilidades y relegarla desde el punto de vista orgánico, algo que no ha sentado bien en una parte del PP valenciano.

La opinión general es que este movimiento la aleja un poco más del posible relevo de Carlos Mazón. Es otro motivo más para resistirse a un posible cambio. Si su "cómoda" alcaldía en València, su vida personal y las turbulencias de las Corts la alejan de esa opción, este último movimiento de los presidentes provinciales podría ser definitivo. Nadie cree que Catalá entre en la disputa orgánica y contribuya a una batalla interna. No es su forma de entender la política, dicen quienes la conocen.

Ahora bien, hay una fuerza mayor dentro de los partidos que se llama dirección nacional. En esto también hay unanimidad. Rita Barberá no quería ser candidata a la alcaldía en el año 2015 y Mariano Rajoy la convenció en una comida de tres horas en Moncloa. No puede descartarse que Feijóo haga lo propio con María José Catalá. Pero, desde luego, en su entorno no creen que sea un paso fácil para ella. Y después de los acontecimientos del fin de semana, menos.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents