Son parte de la familia y desde el momento en el que llegan a casa son uno más. Las mascotas son, en muchas ocasiones, los verdaderos dueños de las casas y casi siempre pasan más tiempo en ellas que sus dueños humanos. El trabajo o la escuela hace que nuestras mascotas pasen la mayor parte del día solas en casa y cuando se trata de cachorros eso conlleva las inevitables manchas de orina.
Es uno de los primeros deberes de todo dueño de mascotas. Afrontar la educación de su pequeñín. Enseñarle dónde hacer sus necesidades y acostumbrarlo a salir a la calle o al parque para orinar y defecar. Hasta que eso ocurre y la mascota controla sus necesidades y aprende dónde hacerlas es casi inevitable que orine en el suelo de casa. ¿Qué hacer entonces?
Aunque parezca una tontería, es importante elegir bien los productos de limpieza que se utilizar para limpiar estas manchas de orina porque mucha gente desconoce que elección de uno de los productos más usados en los hogares podría hacer que la mascota volviera a orinar en el mismo sitio.
¿Cómo limpiar las manchas de orina?
Lo primero que hay que hacer es secar la zona y recoger los restos de orina. Es recomendable usar papel de cocina o papel de periódico. El objetivo es eliminar los residuos líquidos y dejar la superficie del suelo totalmente seca. A continuación hay que desinfectarlo y limpiarlo. Es el momento clave. Muchos dueños usan lejía. La superficie queda desinfectada y perfumada con el olor del limpiador pero es muy probable que al día siguiente o al cabo de unas horas el cachorro vuelva a orinar justamente en el mismo sitio. ¿Por qué?
La explicación a este fenómeno es muy sencilla aunque escapa a nuestro sentido del olfato. La orina del perro tiene cierto olor a amoniaco, y los perros se guían mucho por el olfato para marcar el territorio y tienden a orinar casi siempre en lugares con fuerte marcaje y olor. La lejía es un limpiador que interactúa con la orina y reacciona con uno de sus compuestos: la urea. Esta reacción provoca olor a amoniaco y es ese olor el que el cachorro percibe e interpreta como que ese es el lugar en el que debe orinar. Los mismo ocurre si se utiliza amoniaco para limpiar la mancha.
La solución es huir de estos dos limpiadores y usar alternativas sin lejía ni amoniaco. Hay algunos productos enzimáticos que desinfectan sin utilizar lejía. Existe también la alternativa de utilizar limpiadores naturales que consigue limpiar y desinfectar utilizando vinagre y un poco de bicarbonato. En este caso es conveniente diluir un poco de vinagre en agua caliente y añadir un par de cucharadas de bicarbonato. Con ese agua ya se puede limpiar la zona.
