Los perros suelen soltar mucho pelo, sobre todo algunas razas en especial. Para evitar que la cama de tu perro huela mal o acumule demasiado pelo, debes limpiarla con asiduidad. Para poder hacerlo de la forma más rápida y cómoda, te damos una serie de trucos.

Lo primero que debes hacer es retirar todos los pelos de la funda. Puedes utilizar un aspirador, un rodillo para quitar los pelos, o bien un cepillo especifico para recoger el pelo de los animales.

El siguiente paso sería separar la funda de la cama de la espuma. Por un lado, la funda la puedes lavar sin ningún tipo de inconveniente en la lavadora, pero para evitar cualquier tipo de reacción o alergia, utiliza para ello un detergente para lavar la ropa de los bebés, que sea hipoalergénico.

Una vez saques y tiendas la funda, quita el filtro de la lavadora y vacíalo, por mucho que te hayas esmerado en retirar los pelos seguro que alguno se te ha escapado. Después limpia el tambor con papel absorbente.

A continuación, introduce la espuma en un barreño y sumérgela en una mezcla de agua y detergente también. Déjala durante media hora, y después enjuágala muy bien. Extiéndela al aire libre y deja que se seque.

Finalmente, es muy importante que te asegures de que tanto la funda como la espuma están totalmente secas antes de volver a montar la cama.