Con Halloween a la vuelta de la esquina, llega una de las fechas más esperadas por los más pequeños. Y no sólo por las chucherías y el 'truco o trato' que cada año se extiende más en nuestro país. En esta época los niños tienen la oportunidad de poner en marcha su imaginación y creatividad a través de divertidas manualidades para Halloween con las que además podrán decorar la casa.
Por ello te proponemos algunas ideas de decoración de Halloween con las que puedes sorprender a los más pequeños con un plan divertido de manualidades.
Telaraña de palos
Con unos sencillos palos de polo y lana de colores puedes conseguir unas simpáticas telarañas con las que decorar tus paredes. Pega tres de estos palitos con un poco de cola o silicona líquida y después píntalos con temperas de colores. Una vez la pintura esté seca, corta un trozo de lana, átalo en uno de los palos y comienza a enredarlos como si fueran una telaraña.
Murciélagos colgantes
Esta es una de las manualidades para Halloween más fáciles de hacer. Sólo necesitarás tubos de papel higiénico, pinturas, cartulinas y chenillas o limpia pipas. Pinta el rollo de negro para preparar tu murciélago. Después, corta la forma de las alas y las orejas en una cartulina y pégaselas con cola. Ahora puedes pintar la cara del murciélago en el cartón o aprovechar para pegarle ojos móviles. Finalmente, para poder colgarlo tendrás que en la parte baja del tubo dos agujeros sobre los que pasar las chenillas.
Fantasmas amigables
Para hacer este simpático fantasma necesitarás cortar tela blanca en pequeños cuadrados. Utilizar tijeras con formas es una opción que les encantará a los más pequeños de la casa. Llegados a este punto puedes pintar rallas o puntos en los bordes de la tela para darle a tu fantasma un toque más original. Ahora coge una bola de corcho, que podrás encontrar en cualquier tienda de bricolaje o manualidades, envuelve la tela sobre ella y ata un trozo de lazo en lo que sería el cuello de tu fantasma. Para terminar tu manualidad para Halloween solo tendrás que pintarle los ojos y colgarle un trozo de hilo de pescar o cualquier otro tipo de cordel transparente.
Calabazas de lana
Esta manualidad para Halloween es un poco más complicada, pero si la sigues paso a paso verás como no tendrás ningún problema y a los niños les encantará hacerla. Comienza inflando algunos globos de distintos tamaños, aunque cuanto más pequeños mejor. Después, corta varios trozos de lana naranja y mételos en un bol que contenga una mezcla de cola y agua (un truco opcional es añadirle una pizca de harina para que espese un poco). Saca la lana del bol, elimina los excesos de cola y comienza a enrollarla alrededor de los globos. Deja secar los globos colgándolos (a poder ser al aire libre). Una vez estén totalmente secos pincha los globos y decora tus calabazas con una chenilla verde.
Tarros brillantes
Con un poco de pintura que brilla en la oscuridad y unos simples tarros vacíos conseguirás esta sorprendente decoración casera para Halloween. Pinta el interior de los tarros con gotas de la pintura fluorescente y después llénalos de agua. Algo tan sencillo como esto les encantará a los más pequeños de la casa.
Fantasmas de lana
Corta lana de color blanco y enróllala sobre un cartón, dándole unas 20 vueltas. Pasa otro trozo de lana por debajo de las que has enrollado anteriormente y júntalas dando un nudo. Después, dale la vuelta al cartón y corta la lana que habías enrollado por la mitad. Para terminar esta manualidad para Halloween sólo tendrás que decorar tus fantasmas con un poco de lazo naranja y pegarles los ojos y la boca de cartulina.
Fantasma flotante
A los más pequeños de la casa les encantará esta decoración para Halloween casera. Para crear este pequeño fantasma necesitarás un una botella, una pelota pequeña, un paño y almidón. Crea la estructura del fantasma y añade el almidón con un spray para conseguir que el paño se quede rígido. Para darle un toque más original, puedes decorarlo con unos ojos móviles.
