Miley Cyrus vive un momento muy desequilibrado: en lo profesional no tiene razón para quejarse, sus fans la adoran más que nunca y sus últimos singles han arrasado.

Sin embargo, en el lado sentimental le va fatal. Su novio desde hace 4 años le ha dejado por otra, y probablemente le ha sido infiel, después de que llevasen un año comprometidos y hablando de boda.

De hecho, se puso a llorar mientras cantaba una de sus canciones que habla de una tormentosa ruptura sentimental. Pues por lo visto ahora Miley ha decidido una nueva táctica.

Miley apareció en el escenario del iHeartRadio Music Festival con un vestido de rejilla y sin sujetador alguno. Solo llevaba un cubrepezones, pero aún así se podía intuir toda su figura. Además lució unas braguitas negras, unos botines y una torerita de pelo en los brazos.

Un look un poco estrambóticos y muy moderno, en su línea de enseñar mucha piel.