Teresa Romero se convirtió en el rostro visible del ébola, al infectarse en su puesto de trabajo como enfermera en un hospital de Madrid. Totalmente recuperada ha reaparecido en 'Espejo Público'.

El rostro de Teresa Romero protagonizó portadas y horas en los medios de comunicación, lo pasó realmente mal y fue una víctima de una enfermedad que arrasa en África dejando miles de muertos todos los años.

Teresa Romero ha compartido su propia experiencia en el programa de Susanna Griso, donde ha mostrado su cambio físico: el pelo mucho más largo, el rostro lustroso y una apariencia sana y fuerte. Una imagen que dista mucho a la que recordábamos de la enfermera y que ha supuesto una alegría para los espectadores y todos los que se preocuparon por su estado de salud.

Teresa Romero ha aprovechado la proyección pública para denunciar la situación en la que están trabajando muchos sanitarios españoles, contagiándose diariamente por el Covid-19: "Están pasando cosas surrealistas, no se tomaron medidas con anterioridad y, además, envían mascarillas y test que no valen para nada", asegura Romero.