El hijo pequeño del duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart, y Belén Corsini se han dado el "sí, quiero" este mediodía en los jardines del Palacio de Liria tras tres años de relación, una boda que une a dos de las familias más poderosas del país: los Alba y los Corsini, aristocracia real y elite empresarial.

La ceremonia -religiosa, familiar y discreta- comenzó pasada las 13:00 horas y concluyo una hora después y, debido a las restricciones sanitarias, el número de invitados ha sido limitado, lejos de los 300 que asistieron a la boda de su hermano Fernando Fitz-James con Sofía Palazuelo, celebrada en el mismo escenario en octubre de 2018.

El enlace ha tenido lugar en los jardines del Palacio de Liria, oficiado por el párroco Ignacio Sánchez-Dalp, amigo de la familia.

El nieto de la fallecida Cayetana de Alba llegó al altar del brazo de su madre, Matilde Solís, la madrina de la boda, vestida de Caprile; la novia lo hizo junto a su padre, Juan Carlos Corsini Muñoz de Rivera, de blanco con un diseño de Navascués.

Los invitados comenzaron a llegar al Palacio de Liria en torno al mediodía y, aunque las mascarillas y pamelas hacían difícil identificarles, uno de los primeros captado por los fotógrafos fue el padre Ángel.

Jacobo Fitz-James Stuart, el conde de Siruela, asistió con Inka Martí, con quien se casó en segundas nupcias en 2004. Su hijo Jacobo, fruto de su anterior matrimonio, llegó con Asela Pérez Becerril y sus hijos. Las cámaras también retrataron a Fernando Fitz-James y Sofía Palazuelo, a Brianda Fitz-James, prima del novio, o a Javier Martínez de Irujo e Inés Domecq, que llegaron en coche, al igual que Alfonso Díez, viudo de la duquesa de Alba.

El gran ausente ha sido Cayetano Martínez de Irujo, que permanece hospitalizado por problemas intestinales, aunque sí ha estado su pareja, Bárbara Mirjan, con un vestido largo blanco con estampado floral negro, firmado por Jorge Vázquez.

Carlos Fitz-James Stuart y Solís, de 29 años, conde de Osorno, es hijo del duque de Alba y Matilde Solís, hija de los marqueses de la Motilla; Belén Corsini, de 32 años, es hija de Juan Carlos Corsini Muñoz de Rivera y de Mónica de Lacalle Rubio, miembros de "La Tribu", como se conoce a su familia, una de las dinastías inmobiliarias más ricas del país (Corsán).

Hasta ahora, esta joven pareja ha mantenido un perfil público bajo, ambos son muy celosos de su vida privada, no aparecen en eventos ni se prodigan en redes sociales.

Él estudió en Madrid Comercio Internacional en el College For International Studies, después cursó un máster en Boston (EEUU) y está al frente de la marca comercial Casa de Alba Fine Food, mientras que ella estudió Administración y Dirección de Empresas en ICADE y trabaja en las explotación de las fincas y los negocios inmobiliarios de la familia