El primer problema al que ya se está enfrentando Daniel Sancho en la peligrosa cárcel de Surat Thani

Daniel Sancho ha sido condenado a cadena perpetua por el crimen del cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta. Además, ha sido trasladado desde la cárcel de Koh Samui a la prisión de Surat Thani, a la que llegó el pasado viernes por la tarde en un furgón blindado, y donde parece que el español ya está sufriendo los primeros problemas.

Ahora mismo el hijo de Rodolfo Sancho está cumpliendo cuarentena por covid, ya que en las cárceles tailandesas continúan guardando esre protocolo, que ronda entre los seis y diez días aislado. Durante este tiempo no podrá recibir visitas de sus familiares, y solo podrá verse con su abogado, tal y como han informado fuentes de la prisión.

La nueva cárcel tiene unas condiciones muy diferentes a la antigua, y es que para empezar el perfil de presos es completamente diferente. En la cárcel en la que acaba de ingresar Daniel Sancho se encuentran los condenados a cadena perpetua, o penas que superan los 25 años, y la mayoría han sido condenados por delitos de sangre.

Además, en la mayoría de las celdas los presos se encuentran completamente hacinados, y es que en algunas de ellas se alojan hasta 20 reclusos, y varios de ellos duermen en el suelo. Por otra parte, pueden llegar a estar encerrados hasta 12 horas al día en estas celdas, y la tasa de mortalidad es de un 25% cada dos años debido a todas las enfermedades contagiosas.

Pero Daniel Sancho, por el momento, no está viviendo ninguno de estos problemas. El primer inconveniente que se ha encontrado el español al llegar a esta nueva cárcel es la dificultad de comunicarse. De hecho, los trabajadores han asegurado que lo primero que hizo el hijo de Rodolfo Sancho nada más bajar del furgón blindado fue preguntar si alguien hablaba inglés y, viendo la situación, solicitar un intérprete.