Rocío Carrasco habla tras el esperado reencuentro con su hija: "Todo bien"

Dos de los personajes más populares de este país, y que llevaban más de una década distanciadas pese a ser madre e hija, se han vuelto a reencontrar hoy lunes, 23 de junio, en los juzgados de la Audiencia Provincial de Madrid. Al salir, una de ellas se ha visto desbordada por la emoción mientras que la otra hacía unas breves declaraciones a los medios de comunicación que se habían congregado a las puertas de las instalaciones judiciales.

Se trata de Rocío Carrasco, hija de Rocío Jurado, y de su primogénita, Rocío Flores, con la que no tiene ningún tipo de contacto desde hace años. Ambas han acudido a los juzgados en calidad de testigos para prestar declaración en la causa que abrió Rocío Flores y su padre, Antonio David Flores, contra una productora de televisión por difundir datos y documentos sobre la joven cuando ésta aún era menor de edad.

Las palabras de Rocío Carrasco

La primera en llegar ha sido Rocío Carrasco, que vestía un traje de chaqueta y pantalón en color blanco y estampado con una delgada línea en color coral. Luego, ha hecho su aparición su hija, Rocío Flores, quien vestía un vestido largo muy veraniego. La nieta de Rocío Jurado ha llegado acompañada de su abogado, Iván Hernández.

Al finalizar su declaración en los juzgados, la escena se ha vuelto a repetir y ha sido de nuevo Rocío Carrasco la primera en abandonar el recinto. Lo ha hecho sola y atendiendo amablemente a los medios de comunicación que se habían congregado en el lugar para asistir a este forzoso reencuentro entre madre e hija.

La hija de Rocío Jurado ha seguido su línea habitual de comportamiento y únicamente ha dicho a los periodistas tres palabras: "Todo bien. Gracias". Sin embargo, estos han seguido preguntándole sobre cómo había sido este encuentro con su hija y cómo se había sentido, a lo que ella ha contestado sin rodeos: "Se que lo tenéis que preguntar, pero no os voy a decir nada".

Aún así, los profesionales de los medios de comunicación han continuado lanzándole preguntas sobre cómo había sido el reencuentro, a lo que Rocío Carrasco ha insistido una vez más: "Sé que estáis aquí con el solano y lo siento mucho... No os voy a decir nada".

Rocío Flores, muy emocionada

Instantes después era la otra protagonista, Rocío Flores, quien salía de la sede judicial y tenía que hacer frente a los periodistas. La joven ha exhibido una actitud muy parecida a su madre, pero con ligeros matices, puesto que ha estado a punto de romperse delante de todos.

"Os entiendo y os respeto -ha dicho a los comunicadores nada más que estos han empezado con sus preguntas-, pero no quiero decir absolutamente nada", ha finalizado con la voz ya a punto de quebrársele por la emoción. Pero, al igual que le había ocurrido minutos antes a su madre, el interrogatorio no ha cesado y ella ha vuelto a interpelar a los periodistas, ya más recompuesta.

"Sabéis que esto es un tema que he querido llevar siempre en la intimidad", ha insistido Rocío Flores, al tiempo que ha asegurado que lo único que deseaba en esos momentos era tener unos momentos de tranquilidad para serenarse. "Os entiendo, pero por favor, entendedme también a mí", ha concluido.

Finalmente, los periodistas la han dejado en compañía de su abogado y ambos han enfilado rumbo hacia el automóvil en el que habían llegado horas antes.