Los Hilos Tensores permiten reafirmar los tejidos descolgados de la cara proporcionando un cierto "efecto lífting" sin necesidad de intervenir quirúrgicamente. Nacidos como una aplicación de los hilos de sutura con puntos de tracción al campo de la medicina estética, su técnica y materiales han evolucionado a lo largo de los años, dando lugar a tratamientos como los "hilos de oro", "hilos brasileños", "hilos Aptos", "hilos mágicos", etc.

Hoy día los hilos tensores más populares son los basados en materiales reabsorbibles que estimulan la producción de colágeno. De ellos tratamos con la Doctora Meliá de la Clínica Dual.

¿Qué son los hilos tensores?

Los hilos tensores son suturas especiales reabsorbibles, estériles y biocompatibles, que están indicadas para el tratamiento de la flaccidez sin cirugía facial.

Con el paso del tiempo los tejidos de nuestra piel pierden su turgencia. Los hilos nos permiten devolver devolver a los tejidos la turgencia que se ha perdido con el paso tiempo y de esta manera rejuvenecemos el rostro, el cuello y otras regiones del cuerpo donde también los aplicamos.

El mecanismo de acción de los hilos consiste en la estimulación de los fibroblastos. Estos producen colágeno alrededor del hilo insertado, produciendo una elevación o tensión (efecto "Iifting") en la zona donde los aplicamos.

¿Qué tipos de hilos tensores utilizan en la Clínica Dual?

Depende de las características y necesidades de cada paciente. Disponemos de diversos tipos de hilos tensores, clasificados según su duración en permanentes o reabsorbibles; según el material del que están hechos como la polidioxanona o PDO, el ácido poliláctico o el polipropileno; y a las características mecánicas de su fabricación, según las cuales producirán mayor o menor tensión o anclaje (monofilamento, espiculados, suturas con conos?).

¿Es un tratamiento facial cómodo para el paciente?

Sí, sin duda lo es. Para empezar, es un tratamiento que se puede realizar en la misma consulta médica y que dura unos 30 o 45 minutos aproximadamente. Y es un tratamiento muy tolerable: las molestias son mínimas, y no hace falta observar un tiempo de recuperación. El paciente regresa de inmediato a su vida habitual y sólo ha de seguir algunas recomendaciones médicas muy sencillas durante los primeros días..

¿Cuánto empiezan a notarse los resultados?

Inmediatamente. Nada más colocados los hilos ya se empiezan a notar los efectos. A partir del primer mes ya se aprecian de forma notable, y van mejorando progresivamente hasta alcanzar el resultado final a los tres meses.

¿Y cuánto dura el efecto?

Una vez hemos llegado al máximo resultado, éste se mantiene un año y año y medio aproximadamente. Hay que tener en cuenta que, aunque hayan sido reabsorbidos, el colágeno que se formó a su alrededor hace que los resultados sean relativamente prolongados.

La duración exacta ya dependerá de muchos factores, como la edad, el tipo de piel, el consumo de alcohol y tabaco, la exposición al sol, etc.

¿Cuáles son los usos típicos de los hilos tensores?

Son muy variados. En nuestros pacientes las aplicaciones más habituales son, por ejemplo, dar más definición al óvalo de la cara, levantar los pómulos, elevar las cejas, suavizar los surcos nasogenianos (las arrugas de la risa que van desde los lados de la base de la nariz hasta las comisuras de la boca) y las "líneas de marioneta" (que alargan las arrugas de la risa hasta el mentón). También los utilizamos para reafirmar y rejuvenecer la zona del cuello.

¿Y no hay riesgo de alterar con esos cambios la expresión de la paciente?

No, en absoluto, eso es algo en lo que quiero hacer hincapié: la expresión del rostro no cambia después del tratamiento, y los resultados son muy naturales.

¿Tienen los hilos tensores aplicación en otras zonas del cuerpo?

Ciertamente. Por ejemplo, en la zona abdominal, o para tratar la flacidez en los antebrazos, o para elevar unos glúteos caidos. Un uso típico sería como toque final complementario a una intervención de cirugía estética, o también cuando hay que reafirmar una zona en la que otros tratamientos no serían suficientes pero no merece la pena acudir a la cirugía.

¿Y, ya para concluir, es seguro este tratamiento?

Sí: el tratamiento con hilos tensores de polidioxanona estimuladores del colágeno, o "mágicos", es una opción segura, efectiva, natural y potente de conseguir buenos resultados estéticos en la cara o en el cuerpo.