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Estimación de la OMS

"En poco tiempo tendremos una sociedad de sordos prematuros"

La presidenta de la comisión de Audiología de la SEORL alerta sobre la exposición al ruido de los jóvenes por la que la OMS estima que 1.100 millones podrían sufrir pérdida de audición

El 50% de los jóvenes están expuestos a niveles de ruido discapacitantes. SHUTTERSTOCK

Hace tan solo unos días, la Organización Mundial de la Salud lanzaba la voz de alarma: 1.100 millones de jóvenes de todo el mundo podrían estar en riesgo de sufrir pérdida de audición debido a prácticas auditivas perjudiciales. Más de 43 millones de personas de entre 12 y 35 años padecen una pérdida auditiva discapacitante debida a diferentes causas, y de los adolescentes y jóvenes de entre 12 y 35 años de países de ingresos medianos y altos, casi el 50% están expuestos a niveles de ruido perjudiciales a consecuencia del uso de dispositivos de audio personales como reproductores de MP3 y teléfonos inteligentes, mientras que alrededor del 40% están expuestos a niveles de ruido potencialmente nocivos en clubes, discotecas y bares.

Un dato más que revelador y bastante preocupante que ha puesto en jaque al mundo de la otorrinolaringología. Porque el uso de los aparatos de música y el ruido en bares y discotecas está regulado, pero son las propias personas las que se exponen a unos niveles que llegan a ser perjudiciales para la salud. O esto es lo que asegura la doctora María Jose Lavilla, presidenta de la comisión de Audiología de la Sociedad Española de Otorrinolaringología (SEORL) y jefa de la Unidad de Implantes Cocleares e Hipoacusias del Hospital Clínico Universitario de Zaragoza. "En el momento actual estamos hablando de estimaciones. Lo que sabemos es que el ruido, a lo largo de la vida, produce un daño de las células del oído. Estas células oyen porque se mueven con la vibración, si hacemos que se muevan excesivamente van a envejecer antes", dice.

Así, la profesional destaca que "a partir de los 65 años la mitad de la población sufre ya una pérdida de la que es consciente y que le está limitando, una pérdida de frecuencias agudas. Ahora, lo que estimamos es que nuestros jóvenes abusan tanto del ruido producido por las actividades modernas, como son los reproductores musicales, que hace que un problema que empezaba con los 35 años se adelante 20". O lo que es lo mismo, los chavales empezarán a notar pérdidas de audición a edades tempranas, concretamente, en palabras de Lavilla, "nuestros jóvenes van a ser una generación de sordos prematuros, a los 40 y 50 años esperarán con problemas".

Así pues, la OMS ha avisado de que "la preocupación por el aumento de la exposición a sonidos fuertes en lugares de ocio como clubes nocturnos, discotecas, pubs, bares, cines, conciertos, eventos deportivos e incluso gimnasios es cada vez mayor. Con la popularidad de la tecnología, algunos dispositivos, como los reproductores de música, suelen escucharse a volúmenes perjudiciales y durante largos periodos de tiempo. Todo ello supone con frecuencia un grave riesgo de pérdida auditiva irreversible". Pero, ¿a qué niveles se expone una persona a sonidos perjudiciales?

Susceptibilidad individual

Según Lavilla, "no debemos exponernos a más 80 decibelios durante 8 horas al día o 40 horas a la semana ( 8 horas al día durante 5 días). Si el nivel de salida es de 89 decibelios, no debemos de escuchar música a esa intensidad durante más de 5 horas semanales". Si los decibelios llegaran a 104, el máximo permitido en un reproductor de música actual, "no se puede escuchar más de 2 minutos al día ni con auriculares ni en un bar o discoteca. O lo que es lo mismo, 10 minutos a la semana" y además añade que "los insertores dan muchos más problemas que los auriculares".

"Con la información necesaria uno debe ser consecuente y hacer las cosas bien para no exponerse a demasiado ruido"

María José Lavilla - Presidenta de la comisión de Audiología de SEORL

Más allá de los jóvenes, la población general también adelantará la probabilidad de padecer problemas en los oídos a 10 años. "Las personas que trabajan con ruidos, como cantantes famosos, de música rock... ahora no solo no oyen, tienen ruidos en los oídos que no les dejan vivir. Ejemplo de ello son Brian Johnson de AC/DC, Phill Collins, el batería de Metallica...", sentencia.

Concretamente, la OMS ha lanzado una serie de folletos informativos en los que da una serie de pautas para prevenir todo esto. "Se deben respetar los niveles seguros de exposición al ruido. Determine el volumen exento de riesgos en su aparato de audio personal ajustando el volumen a un nivel cómodo en un ambiente tranquilo, de modo que no supere el 60% del volumen máximo", señalan, algo que corrobora Lavilla, que también recomienda "usar tapones de los oídos cuando se va a un club nocturno, discoteca, bar, pub, evento deportivo u otro lugar ruidoso...". Utilizar cascos o auriculares que se ajusten bien y, de ser posible, que aíslen del ruido del entorno también es otra de las premisas de la Organización Mundial de la Salud. Porque según la especialista otorrina, "está en manos de las personas. Con la información necesaria uno debe ser consecuente y hacer las cosas bien para no exponerse a demasiado ruido". La profesional advierte de que en el momento que se notan ruidos, distorsiones o tapones son avisos de que en un futuro, si la persona se sigue exponiendo, tendrá problemas. "Hay que tener conocimiento de lo que estamos haciendo, no subir el volumen y controlar el tiempo de exposición", agrega.

¿CÓMO SE PUEDE MEDIR EL RUIDO EN EL AMBIENTE?

  • Una conversación normal son 50 - 60 decibelios y una convesación acalorada pueden ser 80 decibelios.
  • El tráfico rodado en la ciudad son unos 80-85 decibelios.
  • El claxón de un automóvil 90 decibelios.
  • El ruido de una motocicleta son 90 decibelios: daño. Riesgo de lesión auditiva si la exposición se prolonga durante 4 horas.
  • Una sierra eléctrica y los cascos de música son 95 decibelios: riesgo de lesión si la exposición se prolonga 2h
  • Una discoteca, petardos y pirotecnia son 110 decibelios: daño inmediato
  • Un concierto de rock y un taladro son 120 dB: riesgo de lesión auditiva si la exposición se prolonga 7m
  • Una sirena Tren o una alarma de incendio son 125 dB DISCONFORT (un ruido de 120 db ya produde dolor, es insoportable).
  • Un martillo neumático son 130dB.
  • Un avión despegando son 140dB.

Por otro lado, la especialista asegura que también existe "una susceptibilidad individual". "La evolución de la hipoacusia es muy personal, variando de un individuo a otro, aun cuando la intensidad y tiempo de exposición sean los mismos. Personas más susceptibles serían las personas con antecedentes familiares, alteraciones auditivas previas, exposición previa a ruidos intensos y el consumo de medicamentos tóxicos para el oído", concreta para hacer hincapié en una premisa que se ha convertido en lema de la propia OMS: "Si pierdes la audición no la recuperarás".

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