Cuenta atrás para las vacaciones y para el verano. Llega el buen tiempo, las ganas de salir y de tomar el sol. Las mangas largas retroceden para mostrar cada vez más piel. Es tiempo de tirantes, manga corta, pantalones cortos y también de precaución para evitar quemaduras solares.

Los dermatólogos advierten cada temporada de los riesgos que entraña exponerse a los primeros rayos de sol del verano sin apenas protección. Los meses de invierno y otoño se han dejado notar y nuestro cuerpo ha perdido parte de su adaptación natural a la radiación solar. Nuestra piel segrega melanina de forma natural tras la exposición al sol para protegerse contra la radiación ultravioleta y los rayos solares. Pese a todo, la piel necesita un poco de ayuda para adaptarse a las largas jornadas veraniega y a los baños de sol. Los expertos coinciden en la necesidad de utilizar sin excepción protectores solares para prevenir quemaduras en la piel. No hay excusas. Los primeros rayos de sol son los más peligrosos y la protección solar alta es indispensable.

Además de los filtros solares, nuestro cuerpo también puede tener una ayuda extra a través de la alimentación. La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano y, como todo el organismo, está compuesta mayoritariamente de agua. Requiere de una hidratación constante para evitar su deterioro. No solo a través de soluciones tópicas como cremas protectoras, lociones hidratantes para después del sol o aceites corporales. La deshidratación de la piel es el principio de la quemadura y la abrasión epidérmica. Por eso, es conveniente tomar abundantes líquidos durante estos meses. Las opciones son infinitas: agua, zumos naturales, limonada natural o, por qué no, preparaciones a base de leches vegetales. Todas estas alternativas brindan además de hidratación todo un arsenal de vitaminas que ayudarán a reponer las que se pierden a través de la transpiración.

Y es que la alimentación es clave también para mantener hidratada la piel y prepararla para lograr un bronceado saludable. Según explican de la Clínica Universitaria de Navarra, a través de su propia web, la clave reside en garantizar que el cuerpo pueda sintetizar correctamente la melanina. Según este prestigioso centro médico, "en las épocas de calor, cuando estamos más expuestos al sol, es importante llevar a cabo una alimentación variada, pero especialmente rica en frutas, verduras y grasas saludables, en forma de comidas ligeras y refrescantes".

Cuando las temperaturas son más cálidas, nuestro cuerpo necesita menos calorías. Las frutas y verduras además de contener gran cantidad de agua, contienen nutrientes esenciales para nuestro organismo y, entre otros, nos ayudan a mantener una piel hidratada y adecuadamente nutrida. Es importante realizar una alimentación variada que nos aporte las vitaminas y minerales necesarios en esta época del año en la que nos encontramos más expuestos al sol.

Algunos de los alimentos clave para lograr una piel hidratada y un bronceado más saludable

Algunos de los alimentos esenciales que no pueden faltar en tu diera si quiere lograr una piel saludable y bronceada son estos:

Vitaminas liposolubles: Presentes en algunos productos como el aceite de oliva, el pescado (sobre todo el pescado azul), los frutos secos y el aguacate. Contienen ácidos grasos insaturados, necesarios para que la piel está hidratada y adecuadamente estructurada.

Los huevos y los lácteos:  Son ricos en Vitamina A. Esta vitamina es necesaria para la renovación de la piel y mucosas. Los alimentos ricos en Vitamina E como el aceite de oliva, los vegetales de hoja verde, los cereales de grano entero y los frutos secos, actúan contra los radicales libres, aumentados durante el verano por la exposición solar, evitando su acumulación y reduciendo el riesgo de aparición de manchas solares.

Vitaminas hidrosolubles: Como la vitamina C, presente en frutas y verduras frescas y crudas. Es importante consumirlas en crudo. Es antioxidante, y es básica para la producción de colágeno en la piel. La za

Además, la dieta debe ser variada. Es necesario incluir una gran diversidad de alimentos como la carne, el pescado y marisco, huevos, lácteos, verduras, frutas, legumbres, cereales y frutos secos. Van a proporcional la Vitamina B necesaria para procesos de renovación celular que contribuirán en un correcto estado de piel cabello y mucosas.

Las grasas saludables son esenciales para una buena estructuración de la piel

Minerales: El selenio, presente en carne, pescado, marisco, cereales, huevos, frutas y verduras, va a tener también función antioxidante, y el Zinc, presente en carnes, vísceras, pescado, huevos, cereales completos y legumbres, favorecerá la elasticidad de la piel al colaborar en la formación de nuevas proteínas.

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La verdad sobre las zanahorias y el bronceado

Quién no ha oído que las zanahorias son buenas para lograr un bonito bronceado. Esta verdura, al igual que los pimientos, los boniato, la batata o la calabaza contiene caratenoides. Esta sustancia es la causante de su color vivo y actúan como antioxidantes en la piel y también le confieren un color luminoso mediante su ingesta. Al ingerirlos, actúan como protectores endógenos de la piel frente a los efectos dañinos de la luz ultravioleta. Pero no actúan como pantalla fotoprotectora, sino que frenan o reparan los daños oxidativos que el sol provoca en la piel. Hay que tener en cuenta que los carotenoides no evitan las quemaduras solares, pero sí elevan la cantidad mínima de exposición a la radiación UV requerida para causar una quemadura solar