SATSE ha advertido de que el sistema de notificación de positivos de test de autodiagnóstico que están negociando Sanidad con las farmacias supone "riesgos e inseguridad para usuarios" ya que los datos "pueden no ser reales" y las oficinas "se convertirán innecesariamente en peligrosos focos de contagio", según señala el Sindicato de Enfermería en un comunicado.

Al respecto, en un comunicado, el sindicato aclara que no quiere entrar en conflicto con los farmacéuticos, pero recalca que los test de autodiagnóstico que se comercializan en las farmacias solo son un "complemento" y necesita la confirmación del resultado a través de la Prueba Diagnóstica de Infección Activa (PDIA) que realiza Enfermería, profesionales con la cualificación técnica y las competencias necesarias.

Además, apunta que las farmacias "no son espacios debidamente acondicionados" para que los contagiados acudan a realizarse un auto-test o a notificar su positivo y que los farmacéuticos "no cuentan con los equipos de protección individual (EPI) que sí tienen las enfermeras, ni de tratamiento de residuos, sin olvidar que los farmacéuticos atienden a otros usuarios, incluidos inmunodeprimidos, mayores, o niños".

Además, constata que el sistema que estudia implantar la Conselleria puede posibilitar que datos clínicos privados de los pacientes de la Sanidad pública pasen a manos de las oficinas de farmacia, que no dejan de ser empresas privadas, algo que SATSE rechaza por que "puede vulnerar los derechos de los ciudadanos en cuanto a la protección de los datos clínicos de sus enfermedades".

Por último, cuestiona qué interés puede tener que los farmacéuticos notifiquen a la Conselleria los positivos, ya que lo notificado por ellos "tiene la misma validez que lo que el contagiado notifique al centro de salud a través de la app 'GVA Coronavirus'".

Así, recuerdan que esta aplicación permite notificar desde casa un resultado positivo en el auto-test y obtener una cita para la realización de la PCR de manera "totalmente gratuita y con todas las garantías".

SISTEMA PELIGROSO

Por todo ello, SATSE considera que pretender usar las farmacias como una extensión asistencial del sistema sanitario público es "peligroso" porque "no cumple con la seguridad, fiabilidad y validez de la prueba y supone un riesgo para la salud del resto de los usuarios de las farmacias y de los propios farmacéuticos".

Por contra, insta a Sanidad a reforzar el sistema sanitario con las enfermeras y enfermeros necesarias para realizar los test de forma segura y gratuita en los centros sanitarios, utilizando también los módulos de refuerzo voluntarios para que las enfermeras doblen turnos a fin de "desatascar" las pruebas. Igualmente, propone instalar carpas similares a las que se están usando para la vacunación para agilizar la realización de test.

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