La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del HUCA, la zona cero en Asturias de la lucha contra la pandemia, ha implementado la formación al personal, que trabaja a destajo desde hace semanas con procedimientos medidos al milímetro destinados a los pacientes con coronavirus. Uno de ellos es la técnica llamada pronación. Cuando un paciente ingresa en la Unidad de Cuidados Intensivos se le cogen las vías que sean necesarias y se le pone la medicación de rigor. Pero, aquí viene el punto clave, al paciente se le pone boca abajo, debido a que puede recuperar mejor la oxigenación arterial. El afectado puede pasarse boca abajo muchas horas, aunque cada poco los sanitarios le cambian de postura, tanto los brazos como la cabeza.