La pandemia provocada por el coronavirus ha puesto de manifiesto el déficit de infraestructuras sociales que sufre tanto la Comunitat Valenciana como España. Se han detectado carencias en infraestructuras sanitarias y socio sanitarias como las residencias de personas mayores. También necesidades en infraestructuras de transportes que garanticen la movilidad de proximidad a la ciudadanía de forma segura y eficiente. Y ha quedado patente la urgencia de afrontar los retos que plantea el cambio climático.