Carlos Mazón tiene difícil últimamente completar un acto oficial sin que se le reproche su gestión de la dana del pasado 29 de octubre. Este lunes tampoco ha sido una excepción pese a que era un evento propicio para que reinara la calma: una entrega de títulos de funcionario autonómico a personas con discapacidad al que únicamente acudían los protagonistas y los familiares. Aun así, el jefe del Consell ha vuelto a escuchar el grito de "Mazón dimisión" y comentarios sobre su comida en El Ventorro aquella fatídica tarde, que sigue sobrevolando sobre su día a día.
