"La posidonia es muy importante en el mundo" y, además, "hace de barrera para no destruir la costa". La pequeña Elizabeta, de seis años, alumna del colegio Ausiàs March dels Poblets y Martina Miñana, de ocho años, del colegio Les Vessanes (Dénia) lo tienen claro. A pesar de su corta edad, se han convertido en embajadoras de la posidonia con el objetivo de proteger los fondos marinos.

Elizabeta y Martina han formado parte del congreso sobre biodiversidad marina dentro del "Projecte Posidònia", que reunió ayer a más de 400 escolares, procedentes de Dénia, Teulada-Moraira y Poble Nou de Benitatxell, en el auditorio Mar Rojo del Oceanogràfic.