Las medidas están encaminadas a hacer más asequibles los alquileres. Por un lado aumentando la oferta y por otro controlando los precios donde están más disparados. La ley pone el foco en las llamadas zonas tensionadas. Y qué es un área tensionada, pues aquella donde el gasto medio del alquiler supera el 30 por ciento de los ingresos medios de la zona. En estas áreas, será obligatorio que los grandes propietarios rebajen alquileres. A los pequeños propietarios sin embargo se les bonifica hasta el 90 por ciento del IRPF a cambio de que rebajen el alquiler un 5 por ciento. Para que haya más pisos accesibles, el 30 por ciento de las nuevas promociones se reserva para vivienda protegida. Los expertos recuerdan que la aplicación depende de las comunidades autónomas . Y que entre la tramitación y los 18 meses de demora, la ley no estaría hasta el final de la legislatura.