La fallera mayor de València, Berta Peiró, se ha sumado a la nueva moda de mostrar reacciones emocionales en vísperas de la exaltación. En concreto, relacionadas con el traje que estrenarán ese día. En este caso lo ha hecho con un "slomo" en el que exhibe sus expresiones al ver el resultado del tejido de su espolín.

El traje se está realizando en Torrent y a estas alturas está ya preparado para ser llevado a su domicilio. Todo ello con las habituales medidas no sólo de seguridad -para que llegue en perfecto estado- sino de discreción, para que no se desvele el color del fondo. Una liturgia con el que una parte de la sociedad fallera se entretiene durante los días o semanas previas al acto.