La comisión de Reino de València-Císcar se ha llevado un susto enorme cuando, a las cinco de la mañana, se les ha notificado que había ocurrido un accidente en la carpa. El relato es sencillo, pero no menos alarmante: un coche, aparentemente sin control, entró a toda velocidad en la carpa, golpeó uno de los hierros de sujeción y se llevó por delante una jaula con sillas que, a su vez, rompío una puerta lateral. No contento con ello, abandonó el lugar marcha atrás, causando más destrozos, perdiéndose la pista. Aunque no ha llegado especialmente lejos, porque en la carpa quedó no solo gran parte del morro, sino la matrícula, con lo que ha sido fácilmente identificado.
