La plaza de Yaser Arafat, en el centro de Ramala, estalló en júbilo tras conocer los resultados de la votación en la Asamblea General de la ONU que aprobó la aceptación de Palestina como estado observador no miembro en el foro multinacional. Cientos de personas habían seguido con atención en la plaza a través de una pantalla gigante el discurso del presidente Mahmud Abás, que pidió al mundo que "emita un certificado de nacimiento para el estado de Palestina".