Tensión en las calles de Jartúm, capital de Sudán, tras el golpe de estado militar. Cientos de personas han salido para protestar contra el amplio sector del Ejército que ha decidido recuperar el poder tras dos años de transición hacia la democracia. Han sido detenidos varios miembros civiles del Consejo Soberano de Sudán, que actuaba como jefe de Estado en el país. Entre ellos está el primer ministro, pero también gobernadores estatales, incluido el de Jartum, y líderes de las principales organizaciones civiles sudanesas. Estados Unidos se ha apresurado a condenar el golpe y a amenazar con retirar todas las ayudas a Sudán si este se consolida.