Para Volodimir Zelenski este apretón de manos con la presidenta de la Cámara de Representantes del Congreso estadounidense es toda una señal del apoyo de la Casa Blanca a Ucrania.

Un pueblo comprometido con la lucha por la libertad, dice Pelosi, con el que promete estar hasta obtener la victoria.

Un espaldarazo sorpresa a un mandatario que pide a la comunidad internacional el embargo del petróleo ruso y asegura que el Kremlin se prepara para más pérdidas humanas.

"Están reclutando a gente con menos ganas y poca experiencia de combate", dice, añadiendo que ya han muerto 23.000 soldados.

Mientras Moscú intensifica los combates en la región del Donbás. Un rayo de esperanza, dicen fuentes del Ministerio de Defensa ucraniano, es la salida de estos autobuses, donde medio centenar de civiles, entre ellos varios menores, huyen de la acería de Mariúpol. Allí siguen atrapadas en condiciones infrahumanas unas mil personas. Junto a ellas resisten también 2.000 soldados, cientos de ellos heridos. Y en la arrasada Chernigov, intentan reconstruir sus vidas. entre lágrimas por todas las pérdidas humanas. "Nunca perdonaremos a los rusos", dice Valentyna, que finalmente ha podido enterrar con dignidad a su marido.