El primer ministro de Australia, el laborista Anthony Albanese, ha proclamado la victoria de su formación en las elecciones generales celebradas este sábado y ha dicho que está en "camino de formar un Gobierno con mayoría absoluta", cuando aún no ha terminado el escrutinio.

Esta victoria se interpreta internacionalmente como una nueva derrota de Trump, que esperaba un ascenso de la derecha en el país oceánico.