Las elecciones generales del 23 de julio tienen consecuencias en muchos más ámbitos de los que pensamos. Preocupaba en el mundo fallero el hecho de que la cita electoral coincidiera con la última fecha de las preselecciones a Fallera Mayor de Valencia, ante el riesgo de que cualquiera de las candidatas fuera elegida para formar parte de la mesa electoral. Y es que participar como aspirante a la preselección, incluso tratándose de un acto municipal, no es razón de peso para eludir el compromiso de estar en la mesa electoral. 

Ante el riesgo de perjudicar a cualquiera de las candidatas Junta Central Fallera ha anulado la última fecha de las preselecciones y evitar así un posible problema. El máximo organismo fallero del cap i casal había habilitado un total de 13 fechas para los 26 sectores, que finalmente no serán necesarias tantas porque algunos sectores ya han anunciado que continuarán con la costumbre de celebrarlo por su cuenta.