‘Un tsunami de lava’ así lo calificaban los expertos de Involcan cuando captaron las imágenes del desbordamiento. Las coladas de lava han arrasado ya 696 hectáreas y sepultado 1548 edificios; 86 están en riesgo. Según el catastro, 809 serían viviendas. El Instituto Geográfico Nacional asegura que los desbordamientos son habituales y que pueden seguir produciéndose. Ahora estas coladas pierden fuerza porque ganan viscosidad pero los vecinos no saben ya qué pueden esperar. Durante esta noche se han vuelto a producir numerosos terremotos, uno de magnitud 4 en Fuencaliente a las 2:30 de la madrugada. Justo es la zona del sur, la que preocupa ahora, entre Jedey y Las Manchas, donde se ha notado una deformación.