Una de las curiosidades sobre el fallecimiento del papa Francisco se encuentra en el interior de la Basílica de la Virgen de los Desamparados, a las puertas del 'camarín'. Allí, se encuentran los retratos de seis pontífices: Juan Pablo II, Benedicto XV, León XII, San Pío XII, Juan XXIII y Benedicto XVI. Pero, sin embargo, no se ubicará uno similar al de Jorge Bergoglio.
¿Por qué? El motivo lo explica el sacerdote del templo, Salvador Serrat, quien apunta que los cuadros allí expuestos pertenecen a pontífices que tienen una relación especial con el templo y alega dos motivos. El primero de ellos es haber visitado la ciudad de València y la propia Basílica, algo que sí hicieron tanto Juan Pablo II, como Benedicto XVI. El segundo motivo es haber promocionado "el culto y la devoción" por la Virgen de los Desamparados.
Se trata de dos motivos de peso que han llevado a la Iglesia valenciana a encargar retratos de este selecto grupo de cinco Papas.
Su labor por la "caridad"
A nivel particular, como sacerdote y creyente, Serrat destaca la cercanía de Bergoglio con las "personas más necesitadas" y su discurso centrado en "la caridad". Entre algunos ejemplos, indica su visita a las cárceles o su relación con los migrantes. "Ha trabajado por la Iglesia, los pobres y la paz -, reconoce-. Al final, cada pontífice tiene sus matices y sus preferencias, pero todos son buenas para la Iglesia". En eso, han coincido varios feligreses y ciudadanos valencianos por el centro de València en esta mañana tras la muerte de Francisco I.