Un robo de cable en la provincia de Toledo ha dejado a casi 11.000 viajeros atrapados en 30 trenes de larga y media distancia entre Madrid y Andalucía. Muchos de ellos han pasado la noche en los vagones, en mitad de su recorrido y otros, tirados en las estaciones. El ministro de Transporte, Oscar Puente, habla de sabotaje.