Entre gritos de «somos libres» y «victoria de Cristo», los cinco menores detenidos por la presunta violación dos niñas de 12 y 13 años en una casa abandonada de Burjassot, tal como adelantó en exclusiva Levante-EMV, quedaron ayer en libertad vigilada, simplemente con una medida de alejamiento de 200 metros y prohibición de comunicación respecto de sus víctimas.