Solo tres meses le ha costado a los agentes de la Guardia Civil del Área de Investigación de Massamagrell desmantelar un entramado familiar que había montado un auténtico supermercado de la droga en una barriada de ese municipio de l'Horta Nord, con el que estaban ganando una auténtica fortuna. De momento, hay once detenidos y uno de ellos acumulaba él solo nueve reclamaciones judiciales: cinco para ingresar en prisión y cuatro para ser detenido, por una diversidad de delitos.
En los registros, además de distintas cantidades de estupefacientes, desde cocaína a marihuana, pasando por cristal y anfetaminas, los guardias civiles les incautaron 116.000 euros en metálico, casi medio kilo de oro procedente del fundido de las joyas con que algunos pagaban la droga, casi medio centenar de teléfonos móviles, abundantes armas blancas prohibidas y hasta un chaleco antibalas.