"Esto es un Kit-Kat" aseguró la candidata a alcaldesa de València por el Partido Socialista, Sandra Gómez. Números en la mano, la formación ha mantenido el mismo número de ediles que hace cuatro años. Ha ganado algunos sufragios más, pero tiene menos porcentaje de voto. Dicho también de otra manera, no ha aprovechado nada la disolución de Ciudadanos. Nadie viró del centro al centro izquierda. Unos resultados que les abocan a la oposición al perder Compromís un edil. Y una paralización en los resultados del grupo socialista que su candidata pensó que tenía una razón muy clara: los debates nacionales.