La Sala Noble de la Biblioteca del MARQ acoge desde el pasado lunes una nueva exposición que ofrece un viaje arqueológico de más de 2.600 años por la historia y evolución del vino en Alicante. La muestra, que podrá visitarse hasta el 11 de enero de 2015, recorre a través de un centenar de piezas las distintas etapas de su cultivo y producción en la provincia y está promovida por la Diputación de Alicante y patrocinada por la DOP Alicante.

La presidenta de la institución provincial, Luisa Pastor, presentó la exposición acompañada por el presidente del Consejo Regulador de la DOP Alicante, Antonio Navarro, y el comisario de la misma, Emilio Soler. Pastor destacó durante la inauguración que «la muestra, con un montaje sencillo pero de enorme sentido y originalidad, propone al visitante un viaje por la historia del cultivo del vino en Alicante desde sus orígenes hasta la actualidad», añadiendo que la cultura vitivinícola en Alicante ofrece un amplio abanico de posibilidades como las catas, rutas, bodegas o viñedos «y ahora tienen la posibilidad de comprender y disfrutar de uno de nuestros grandes valores y conocer su origen, historia, peculiaridades y el renovado interés por sus principales variedades». Por su parte, Antonio Navarro añadió que «en esta muestra el visitante podrá revivir los principales hitos de la presencia del vino en Alicante, su importancia en la sociedad alicantina desde las civilizaciones antiguas a la Edad Media o el Renacimiento; la aventura de nuestros vinos viajeros, el desarrollo socioeconómico que supuso para toda la provincia el siglo XIX antes del modelo turístico ahora constituido o el largo currículum de nuestros vinos en las casas reales»

A través de un centenar de piezas, algunas con más de veinte siglos de antigüedad, „ánforas, tinajas, botellas, copas, publicaciones y otros utensilios vinculados al cultivo y producción del vino„ el visitante puede conocer el origen de su producción en Alicante, en los lagares de l´Alta de Benimáquia (Dénia) del siglo VI a.C, pasando por los íberos, que elaboraban el caldo en la Illeta dels Banyets (El Campello) en los siglos II y III a.C., y la época medieval, cuando la colonización de las tierras del nuevo Reino de Valencia permitió una expansión sin precedentes de los viñedos. Alicante apostó entonces por la vid y en el siglo XV consolidó su crecimiento con la producción masiva de vino destinado a consumo local.

Las obras expuestas pertenecen al MARQ y a otros museos arqueológicos de la provincia como los de Dénia y Alcoy, al Museo de Artes y Oficios de Monóvar o al Archivo Municipal de Alicante. Entre las piezas destacan varias tinajas de gran tamaño, entre ellas una con una antigüedad de 2.600 años, ánforas, botellas, toneles, encorchadoras de botellas, copas o semillas de uva del siglo XV.

La exposición del vino viene a enriquecer la muestra «Deltebre I. La historia de un naufragio» que se presentará en el MARQ el próximo lunes y que surge a raíz del hallazgo de una botella de vino alicantino en un barco hundido hace doscientos años en el Delta del Ebro que ya se exhibe en la exposición «Vinos en Alicante».