La vigésimo séptima edición de la Feria Requenense del Vino cerró sus puertas el pasado domingo con un notable éxito de público. Miles de personas se dejaron ver por el recinto ferial durante las cuatro jornadas en las que se ha celebrado este año Ferevin, uno de los certámenes de vinos más importantes de cuantos se celebran en el ámbito de la Comunitat Valenciana y en el que este año han participado una veintena de productores amparados por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Utiel-Requena.
Los vinos elaborados con la variedad de uva Bobal -mayoritaria en la zona y autóctona de la DOP Utiel-Requena- han sido los grandes protagonistas de un evento en el que tampoco han faltado los cavas -Requena es el único municipio de la Comunitat Valenciana admitido por la DO Cava- y una cada vez mayor variedad de vinos elaborados bajo pautas ecológicas.
Ferevin, que este año ha mantenido sus puertas abiertas de manera ininterrumpida durante los cuatro días de sesiones, ha contado también con un amplio programa de actividades paralelas, entre ellas los cursos prácticos de cata impartidos en una zona habilitada a tal efecto en el recinto ferial que ha congregado a cientos de aficionados.
Durante la jornada inaugural del pasado jueves se entregaron los galardones a los vinos premiados en la tercera edición del concurso que los organizadores de Ferevin convocan entre todas las bodegas asociadas.
