Diego Coello, Altea

Cerca de diez mil personas presenciaron ayer el desfile de la Entrada Cristiana de las fiestas de Moros y Cristianos de Altea que se celebró con la participación de más de un millar de «festers». Por la mañana, al mediodía, se representó la Embajada Mora y el alardo y la rendición del bando cristiano en la fortaleza-castillo ubicada en la plaza de la Iglesia, en el casco antiguo de la ciudad.

Centenares de personas presenciaron la Embajada Mora con la lucha dialéctica entre la embajadora del bando, Laura Orduña Picazo, de la filà Malvins, y el rey cristiano, Francisco Javier Ramón Romero, de Cristians de la Muralla. Éste y sus tropas «defendieron» el castillo con todas sus fuerzas, pero al final el bando moro logró la «conquista» de la fortaleza.

Por la tarde, sobre las 20.30 horas, se inició en la calle Filarmónica el desfile de la Entrada Cristiana que discurrió por la calle Pont de Montcau y la avenida Rei Jaume I hasta la Plaça dels Esports. El desfile lo abrieron las reinas y damas de honor de las fiestas patronales seguidas por el abanderado de la Associació de Moros i Cristians Sant Blai, Ramón Ferrer Martínez, de Cristians de Carteia. A continuación siguieron las distintas escuadras de las «filaes» Carteia, Cristians d$27Altaia, Arquers, Templaris, Corsaris, Maseros, Conqueridors, Cebers, y Cristians de la Muralla llenando las calles con los sonidos de las marchas cristianas interpretadas por más de veinte bandas de música y sus majestuosos trajes y armaduras.

Sobre las nueve y media de la noche entraba por la avenida principal del pueblo, la del Rei Jaume I, la alférez Zuleika Altea Ruiz Cabrera, de la «filà» Conqueridors, montada sobre una carroza en forma de roca a la que acompañaban seis guerreros con sus caballos escoltándola, y precedía un ballet.

Media hora después hizo su aparición la «filà» Cristians de la Muralla que este año ostenta el Reinado Cristiano. Clarines y trompetas a caballo y un gran grupo de percusión anunciaban el gran boato de más de 400 personas que acompañaban a la abanderada Ana Polvoreda Pérez, la embajadora Xelo Ortega Munera, y el rey Francisco Javier Ramón, que, montados sobre una carroza cada uno con alegorías a las murallas medievales que rodeaban Altea, saludaban al numeroso público congregado en el recorrido que, enfervorizado, les lanzaban confetis y serpentinas. Un boato de más de 300 personas con ballets y espectáculos de fuego y teatro en la calle levantaron la admiración del público durante todo el trayecto.

Hoy, domingo, se celebrará a las 12 horas la Misa Mayor en honor al Cristo del Sagrario, cantada por el Orfeón Estella Maris. A las 14 horas se disparará en la escollera del Paseo Marítimo una gran mascletà. A las 20 horas se celebrará la procesión en honor al Cristo del Sagrario y al patrón de Altea, San Blas. A las 00.30 horas se disparará desde la escollera del paseo marítimo un gran castillo de fuegos artificiales. Y a las 01 horas, actuará en la Plaça dels Esports el cantante David de María.