No hace falta irse muy lejos para disfrutar de una escapada fabulosa: la Comunitat Valenciana tiene rincones increíbles en los que disfrutar del paisaje, de la Naturaleza y de la buena gastronomía. De hecho ¿qué tal visitar alguno de los declarados Pueblos Bonitos que tenemos en Valencia, Castelló o Alicante?
Te ofrecemos una selección de los pueblos más bonitos de la Comunitat Valenciana. No te los pierdas.
Una estampa nevada de Morella
Este municipio castellonense ha crecido a los pies de su castillo, icono indiscutible del lugar. Las calles empedradas de Morella aún guardan la esencia de todas las civilizaciones que pasaron por ella. Sus bellas murallas medievales, su acueducto y templos como la iglesia arciprestal de Santa María la Mayor son solo algunos motivos por los que la localidad ha sido declarada Conjunto Histórico-Artístico.
Chulilla
Josep Montesinos/Jorge Hermosilla
El blanco caserío bajo las imponentes murallas de su castillo, la visión del pueblo rodeado de barrancos y muelas, sus bosques, su huerta… forman un conjunto paisajístico que proporcionan una singular belleza al territorio de Chulilla, municipio de La Serranía. A Chulilla podemos considerarla, la ‘bella serrana’.
Chulilla
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El blanco caserío bajo las imponentes murallas de su castillo, la visión del pueblo rodeado de barrancos y muelas, sus bosques, su huerta… forman un conjunto paisajístico que proporcionan una singular belleza al territorio de Chulilla, municipio de La Serranía. A Chulilla podemos considerarla, la ‘bella serrana’.
Altea
Perderse por las calles del casco antiguo de Altea y descubrir su Baluarte y Recinto Renacentista, declarado Bien de Interés Cultural, nos dará a conocer su trazado fundacional de 1617, con edificios de los siglos XVIII y XIX, así como las puertas de acceso al recinto fortificado.
La mejor forma de adentrarse en Altea es recorrer a pie una de sus cinco rutas, guiados por tótems situados por toda la zona, conoceremos el encanto de Bellaguarda, el Baluarte de la Casa de la Señoría, el Raval Marinero, el Portal Nuevo o el BIC.
Calp
Bajo la atenta mirada del majestuoso Peñón d'Ifach se encuentra la localidad de Calp, con esencia de pueblo de pescadores, es uno de los rincones más bellos de la costa alicantina. Calp es playa pero también historia, nada mejor para pasar unos días de descanso.
Chelva
Esta escapada es perfecta para pasar unos días a tan sólo 70 kilómetros de València. Se trata de una localidad con mucha historia, ya que hay yacimientos del Neolítico y la Edad del Bronce. Además podrás recorrer los barrios árabe, morisco y judío del casco antiguo, la Plaza Mayor, donde se encuentra la iglesia Nuestra Señora de los Ángeles, la Playeta, El paso de Olinches, el Puente del Retillo, la Fuente del Cuco, la Fábrica de Luz, el Barrio Morisco, Barrio Judío y la Ermita de la Santa Cruz.
Illes Columbretes
Las Columbretes son un pequeño archipiélago, de origen volcánico, situado frente a las costas de Castelló. Es un paisaje marítimo significativo por sus características de insularidad, su flora y fauna; conformando con todo ello un entorno medioambiental y paisajístico único en las tierras valencianas
Peñíscola
Representa una hermosa combinación de historia y ambiente mediterráneo. Conocida como Ciudad en el Mar, destaca por su singular ubicación sobre un peñón que se adentra en el agua. El punto más elevado lo ocupa el imponente Castillo del Papa Luna, desde el que es posible divisar la bahía de Peñíscola. Las callejuelas de la ciudad antigua están cargadas de encanto, siempre acompañadas de la brisa marina.
Bocairent
Las calles empinadas y escalonadas del barrio medieval conviven con las construcciones góticas y las reminiscencias islámicas en Bocairent, un pueblo ubicado en el extremo sur de la provincia de Valencia y en el que también son muy apreciadas su festividad de Moros y Cristianos.
Guadalest
Guadalest es un destino perfecto para realizar una excursión de un día desde Alicante o Benidorm. Está declarado Conjunto Histórico-Artístico desde 1974 y forma parte de la Asociación Los pueblos más bonitos de España. Este pequeño municipio de apenas 200 habitantes emerge en medio de un paisaje montañoso. Pero, sin duda, lo más llamativo de este lugar es el castillo. Se erige sobre un risco y ofrece unas vistas extraordinarias del pantano de Guadalest.
Tabarca
En este pequeño archipiélago a la isla principal la rodean una serie de islotes: la Galera, l'Escull Roig, l'Escull Negre, la Nau y la Cantera. La isla de Tabarca, situada frente a las costas de Santa Pola, es la única habitada del territorio valenciano. Fue refugio de piratas en sus ataques a la costa valenciana; y el lugar elegido por el rey Carlos III, en el siglo XVIII, para asentar a los liberados cristianos de origen genovés, que habían habitado el tunecino lugar de Tabarka.
Vilafamés
De origen árabe, el municipio está coronado por un flamante castillo y la pequeña iglesia de la Sangre a sus pies. Pasear por sus calles angostas traslada a la época musulmana ya que se conserva la cimentación del castillo y las torres. Uno de sus atractivos son el castillo y Muralla, situado en la cima de la montaña además de la Roca Grossa ubicada en la mitad del pueblo.
Culla
En el corazón del Alt Mestrat encontramos este pintoresco y precioso pueblo. Un recorrido por sus calles y monumentos nos transportará y mostrará la Culla más medieval y mágica: las ruinas del Castillo Árabe, el Granero del Comendador también conocido como la presó, la Iglesia Parroquial del Salvador… Nadie se quedará indiferente ante esta joya de interior. Por cierto, cuenta con numerosos hotelitos y apartamentos rurales, lo que lo hacen ideal para pasar uno días en él.
Una preciosa calle empedrada de Culla
En el corazón del Alt Mestrat encontramos este pintoresco y precioso pueblo. Un recorrido por sus calles y monumentos nos transportará y mostrará la Culla más medieval y mágica: las ruinas del Castillo Árabe, el Granero del Comendador también conocido como la presó, la Iglesia Parroquial del Salvador… Nadie se quedará indiferente ante esta joya de interior. Por cierto, cuenta con numerosos hotelitos y apartamentos rurales, lo que lo hacen ideal para pasar uno días en él.
Este municipio castellonense ha crecido a los pies de su castillo, icono indiscutible del lugar. Las calles empedradas de Morella aún guardan la esencia de todas las civilizaciones que pasaron por ella. Sus bellas murallas medievales, su acueducto y templos como la iglesia arciprestal de Santa María la Mayor son solo algunos motivos por los que la localidad ha sido declarada Conjunto Histórico-Artístico.