Las tres denunciantes del «caso Sanz» mostraron ayer su «satisfacción», en un comunicado, por la sentencia que condena a su antiguo jefe. «El condenado señor Sanz no ha tenido más remedio que admitir la variedad de hechos libidinosos de naturaleza sexual y la utilización de su poder para conseguir sus objetivos», que provocaron en las tres mujeres «trastornos adaptativos con sintomatología ansioso depresiva».
Las tres periodistas también destacan que se haya reconocido la responsabilidad civil subsidiaria de RTVV. «No se puede olvidar que los directivos no hicieron absolutamente nada para evitarlo, para ayudarnos, eludiendo su apoyo y su responsabilidad». Para las tres mujeres que Sanz haya reconocido los hechos supone «el final de un calvario que hemos tenido que soportar». Desde el despacho de abogados que las ha representado recordaban que estas «tres mujeres fueron y han sido las únicas que han denunciado, han sufrido y han sido parte del procedimiento, por lo que se sienten las únicas legitimadas para poder llegar a esta conformidad y a esta solución». Por ello, las tres mujeres piden que «no se utilice este caso, confundiéndolo con otros hechos de RTVV que no han sido denunciados, o con otras situaciones que no han sido vividas por las denunciantes. Nunca se les puede exigir valentía o actitudes diferentes de las que han demostrado, ya que nadie más se ha atrevido a denunciar». Intersindical y CC OO, personados en la causa como acusación popular, mostraron su respeto a la decisión de las afectadas aunque mostraron su insatisfacción porque «este era el juicio a un sistema feudal de relaciones laborales en RTVV».
