CEO de EMAC Grupo

Emi Boix: "Muchos actores importantes dentro del proceso de construcción ya son mujeres"

Boix afirma que, en una empresa familiar como EMAC en la que su padre puso «los valores», sus hermanas y ella aportan hoy factores importantes como la innovación o la sostenibilidad

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV. / Fernando Bustamante

Una vida ligada a la empresa familiar

Emi Boix (Quart de Poblet, 1973) tiene claro que, «desde el primer día» en EMAC, su misión era la de «contribuir a mejorar» la «única empresa del mundo especializada en perfiles y complementos para la cerámica». Para ello, pasó por las distintas áreas de la firma, camino que comenzó de la mano de su padre cuando aún estaba en la universidad, estudiando Derecho antes de «especializarme en el mundo de la empresa». Aunque reconoce que «la mentalidad de empresaria no la puedes borrar de tu cabeza», sí considera que hay que tener una «válvula de escape». La suya, además de su familia y amigos, es viajar que es «mi afición, mi vida».

El contexto geopolítico parece estar enfriando la economía y, con ello, la producción industrial. ¿Percibe un 2024 de preocupación?

Sí, claramente. Hay mucha incertidumbre respecto no solo a los conflictos bélicos que nos quitan el sueño, sino también a todos los intereses que se están moviendo en torno a los conflictos políticos. Este año hay más de 70 elecciones en el mundo y hablar de geopolítica es darse cuenta de cómo de complicado está el mundo. Los precios, los conflictos políticos, los bélicos… al final la suma de todo genera en cualquier empresa una incertidumbre en las perspectivas de futuro.

Un sector en el que tiene negocio, el de la cerámica, está sufriendo. Una vez pasado lo peor, ¿se recuperará?

Dentro de lo que es el sector industrial, vamos muy asociados al cliente de la fábrica cerámica, con lo cual estamos muy unidos. Han pasado una situación especialmente complicada y no se ha recuperado aún. Pero sí que es cierto que las empresas siguen funcionando. Seguimos trabajando tanto en ferias nacionales como internacionales y hay una dinámica potente.

Su actividad se centra en una construcción que parece estar viviendo un frenazo. ¿Se está teniendo que tirar ya de otras ramas de negocio?

Todo lo que es obra nueva y gran construcción es de lo que se habla normalmente como frenazo o como un sector muy importante que tiene una gran aportación al PIB, pero que en este momento se está ralentizando. Pero también hay que considerar que se están moviendo muchos incentivos a nivel económico o de ayudas públicas para mejorar la habitabilidad de las viviendas, la sostenibilidad de la construcción y todo esto también contribuye a una dinamización dentro de lo que es el mundo de la construcción. En ese nicho es donde, aunque sea a menor escala, sí que continúa habiendo muchísima actividad.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV. / Fernando Bustamante

¿Es un ámbito en el que vamos a ver un boom de cara a estos próximos años gracias a esa sostenibilidad?

Tanto los arquitectos, a la hora de diseñar y redactar el proyecto, como los propios constructores o los jefes de obra, igual que los fabricantes de materiales, cada día estamos más concienciados de que tenemos que trabajar por la sostenibilidad, por cuidar no solo nuestro medio ambiente, sino el entorno social en el que vivimos. Y, entre otros factores, la construcción industrializada está creciendo, repuntando con unos factores que están contribuyendo a mejorar la sostenibilidad del proceso de construcción, está reduciendo riesgos y evitando traslados. Es un motor que no para.

¿Cuánto se puede llegar a completar esa sostenibilidad en el sector?

No sabría decirte, pero estamos muy encaminados. Creo que se están haciendo muchísimos esfuerzos. Todos los actores dentro de la construcción están muy enfocados ya a trabajar por una construcción más sostenible. Y cuando hablamos de construcción no pensemos solo en grandes aeropuertos o hospitales, también hablamos del sector servicios con los hoteles, restaurantes o cadenas de retail, donde la propia construcción, reforma o rehabilitación de esos establecimientos también supone una construcción que cada vez debe ser más cuidadosa con su entorno.

Importancia internacional

El negocio de empresas como la suya tiene buena parte del recorrido en la exportación, que parece pasar por dificultades en los últimos meses. ¿Qué perspectivas tiene para esos entornos internacionales?

Hay mercados que por situaciones geopolíticas están sufriendo mucho. Pero hay otros donde la internacionalización es importante en la medida en que conseguimos hacerlo de manera repetida. Podemos hablar en la Unión Europea de cierta estabilidad. Los números no son los más optimistas en crecimientos en Alemania o en Francia, pero sí que hay esa estabilidad. Hay otros mercados como es el continente africano, donde hay mucho por hacer, donde la construcción está en desarrollo y donde son bienvenidos los productos españoles. Hay mucho potencial. Y el mercado latinoamericano, para nosotros en particular, es un mercado muy potente, con muchísimos riesgos, pero mucha diversidad. Con lo cual, a pesar de los conflictos, hay muchos países todavía por conquistar.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV. / Fernando Bustamante

¿Qué peso tiene ese entorno internacional en EMAC?

En este momento estamos en torno a un 70% mercado nacional y un 30% mercado internacional. Francia es uno de nuestros principales mercados exteriores y el mexicano también lo es. A partir de ahí está el chileno o Estados Unidos, donde trabajamos con mucha recurrencia. Tenemos una filial en Italia y otra en Miami, desde donde atendemos todo el continente americano, principalmente Estados Unidos, Canadá y algunos países de Centroamérica y Caribe.

La innovación se erige como un pilar para el éxito para una empresa como la suya. ¿En qué foco dentro de la construcción se puede avanzar más?

Nosotros nos dedicamos específicamente a un nicho de mercado muy concreto, que es el encuentro entre materiales dentro de un proyecto constructivo y, en ese encuentro, se puede innovar todavía muchísimo tanto en las funciones como en el desarrollo de materiales en sí mismo. Ahora estamos trabajando, por ejemplo, con un polímero de alta resistencia, el material Lastra. Al final tratamos de desarrollar nuevos materiales con una visión de minimizar el impacto medioambiental y al mismo tiempo la durabilidad y el diseño de la pieza.

Boix pone en ser «un referente dentro del mundo de la construcción» el horizonte de EMAC, empresa que ya supera el medio centenar de trabajadores y con dos filiales en Miami y Sassuolo, que tuvo el año paso en torno a 10 millones de facturación gracias a un «nicho de mercado pequeño, pero muy constante».

Algunos sectores señalan que esa innovación y digitalización se choca a veces con la falta de profesionales suficientemente formados para dar ese salto adelante. ¿Coincide en qué hay una brecha por solventar ahí?

Todavía no hemos llegado a ese techo, pero sí que es cierto que en la innovación es fundamental contar con los mejores socios para llevar adelante tu proyecto. Las universidades y los institutos tecnológicos nos ayudan a desarrollar y a afianzar los proyectos que iniciamos y de su mano, tanto en los certificados como en la aplicación de normativas como en el desarrollo mismo de los propios materiales. Nos dan ese suplemento especializado.

Empresa familiar con liderazgo femenino

La suya es una empresa familiar con trayectoria. ¿Esa conexión cree que es un factor extra de fortalecimiento?

Sin duda, sí. En EMAC somos una empresa familiar en segunda generación. La fundó mi padre y ahora somos tres hermanas al frente y tenemos una cultura de empresa muy profesionalizada. Pero eso no quita que los valores que aprendimos de mi padre permanezcan y perduren en el tiempo. La empresa familiar lo que defiende es el legado y darle continuidad con el paso del tiempo y de las generaciones. Con lo cual nuestro propósito tiene que ser preservar ese legado, esos valores y tratar de invertir en que el mejor equipo la pueda llevar adelante.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV.

Emi Boix, CEO de EMAC Grupo, en las instalaciones de Levante-EMV. / Fernando Bustamante

Ha hecho referencia al hecho de que está gestionada por tres mujeres, algo inusual. ¿Qué cree que ha aportado este hecho al desarrollo de EMAC?

Contribuimos a la empresa de una manera individualizada. Nosotras no sabemos dirigir igual que lo hacía mi padre, sino que venimos de especialidades profesionales completamente distintas y complementarias. Nos incorporamos a la empresa aprendiendo desde abajo todos los puestos de la empresa y fuimos llegando al punto de dirección. Lo que hemos ido detectando es la necesidad de mantener los valores que mi padre nos enseñó para poder darle continuidad en la empresa y, por otro lado, la adaptación y la importancia de estar constantemente escuchando lo que el mercado requiere. Nosotras aportamos innovación, tecnología, digitalización, sostenibilidad… que son otro tipo de factores que hoy en día cobran especial importancia.

A primera vista se podría pensar que el sector de la construcción está muy masculinizado. ¿Sigue siendo así?

Creo que no. Es cierto que ha sido siempre un sector muy masculinizado, que hay muchísimos actores que siguen siendo señores dentro del sector. Pero sí que es verdad que cada día más hay visibilidad de arquitectas, jefas de obra... muchos actores importantes, dentro de lo que es el proceso de construcción, ya son mujeres, le dan visibilidad a su proyecto y se convierten en referentes. Hoy en día, tanto en la parte de los fabricantes como en la ejecución de la propia obra, ves mujeres de una manera muy habitual.

Planes de futuro

Tras proyectos como el del Aeropuerto de Dubai o el metro de Quito. ¿Hacía donde mira su futuro?

Para nosotros es fundamental ser un referente dentro del mundo de la construcción, en todo lo que son soluciones arquitectónicas para los proyectos. No tenemos una meta preestablecida, pero nos gustaría que se nos identificara como una empresa en la que cualquier proyecto quiere tener ese producto. Invertimos mucho en la propiedad intelectual de nuestros modelos para que sean reconocidos y protegidos en cualquier punto del mundo. Estamos intentando que EMAC llegue a cualquier parte del mundo poniendo todos los mecanismos a nuestro alcance para hacerlo.