La única esperanza que les queda a los cerca de 650 trabajadores que aún están dentro de los muros de Canal 9 en Burjassot para que la emisora se mantenga abierta y activa es un «tamayazo», una revuelta de los nueve diputados del PP en las Corts Valencianes que se encuentran imputados en distintos casos judiciales y que, cabreados por el trato que reciben del president, podrían retirarle la mayoría al Gobierno de Alberto Fabra. Cosas más difíciles se han visto, señalan desde el «pirulí» recordando que cuando el socialista Rafael Simancas iba a ser investido presidente de la Comunidad de Madrid en 2003, sus compañeros Eduardo Tamayo y Teresa Sáez no se presentaron a votar, haciendo presidenta a Esperanza Aguirre (PP), tiempo después. Hay quien dice incluso que alguno está animando a Francisco Camps a liderar el movimiento de rectificación, pero eso no parece tener base. El expresidente no daría un golpe de Estado sobre su sucesor.