Andrés Z., de 31 años, ha sufrido la amputación de su mano derecha debido a una simple discusión de bar ocurrida el pasado domingo en Turís. El herido, que se recupera en el Hospital La Fe de Valencia, explicó a Levante-EMV las circunstancias en las que fue agredido por simplemente salir en defensa de un conocido. "He perdido la mano por defender a un amigo", se lamenta el agredido, que es diestro y tendrá que adaptarse a su nueva condición "sin comérselo ni bebérselo", según su madre.

Todo comenzó a las 14.30 horas del domingo en un bar de Torrent por una cuestión banal. "Nosotros estábamos tranquilos en la terraza, de tertulia, cuando estos dos tipos se metieron con mi amigo Josep y le tiraron una servilleta", explicó el herido. Éste respondió a la provocación insultando al ahora detenido y fue ahí cuando se inició una acalorada discusión. "Vi que le pegaban dos puñetazos y salí a defenderlo", afirma Andrés. Los dos presuntos agresores, vecinos de Turís, le dijeron que "con él no iba la cosa", pero finalmente los echaron del local.

Horas más tarde coincidieron otra vez en un bar de Turís. Un conocido de ambas partes salió a hablar con estas dos personas para recriminarles lo ocurrido esa misma mañana. "Cuando vi que le estaban agrediendo salimos fuera a poner paz", insiste el agredido. Sin embargo, uno de los supuestos agresores se fue al coche y regresó armado con una escopeta de cañones recortados y un cuchillo.

"Le pegó un culatazo al dueño del bar que le rompió varios dientes", recuerda Andrés, quien al verlo entrar armado con una escopeta se escondió detrás de la barra del bar e intentó escapar por detrás. "Uno me pegó una puñalada en la cara y me tiró al suelo. No recuerdo cuando me dispararon, al ver la sangre del brazo pensaba que me habían cortado con el cuchillo", asegura el herido.

Una vez en el suelo está seguro que le propinaron varios golpes, prueba de ello es que tiene fractura del tabique nasal y lesiones en la mandíbula y en un ojo. Pese a no recordar muy bien esos momentos, Andrés asegura que no perdió el conocimiento en ningún momento. "Yo despierto todo el rato, que dicen que si pierdes el sentido te mueres", bromeó.

"Un vecino estuvo aguantándome el brazo hasta que llegó la ambulancia", explicó. "Aún tengo que dar gracias de que el disparo me dio en la mano, iban a matarme", afirma el agredido.

El único detenido hasta el momento por estos hechos, que se entregó voluntariamente el domingo por la noche en la comisaría de Torrent, ha quedado en libertad tras prestar declaración en el juzgado de guardia de Torrent. Está acusado de un delito de lesiones y otro de tenencia ilícita de armas, según fuentes del TSJ-CV.