El Sistema de Emergencias Médicas de Cataluña evaluará la actuación de un médico del SEM que acudió a una urgencia y determinó la defunción de una anciana de 93 años, por lo que avisó a los Mossos d'Esquadra, pero la mujer empezó a moverse cuando esperaban al forense. El martes, vecinas de un inmueble del Eixample de Barcelona avisaron al SEM de que una anciana de 93 años había muerto en su casa.

Una ambulancia se trasladó al piso y el médico encontró a la mujer «sin signos vitales», por lo que determinó que había fallecido. Después, como marca el protocolo, el médico avisó a los Mossos d'Esquadra para que custodiaran el cadáver hasta la llegada del médico forense. Sin embargo, tras unos minutos, los agentes, sorprendidos, vieron que la mujer se movía, por lo que requirieron un segundo médico, que rectificó al primero, aunque la nonagenaria falleció pocas horas más tarde.