La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Valencia aprobó ayer una modificación de los estatutos que deja fuera del consejo de administración a los representantes de los trabadores. Se trata de una decisión sin precedentes en la EMT cuyo germen fue Saltuv, una empresa que representó todo un hito en el mundo laboral al ser la primera de España en la que los trabajadores eran a la vez propietarios. Con el argumento de hacer más ágiles las decisiones de la empresa, la EMT, presidida por el concejal de Transportes, Alberto Mendoza, ha decidido eliminar la obligatoria convocatoria a las sesiones del consejo del comité de empresa.

Según recoge el punto noveno de la modificación estatutaria, convocar a los representantes de los trabajadores "resultaba anacrónico y contrario al ordenamiento jurídico al no tener la condición de consejeros y no hallarse sujetos a los deberes de lealtad y confidencialidad". La modificación reduce la periodicidad de las reuniones del consejo de administracion con el argumento de "flexibilizar" sustituyendo la reunión mensual por una mínima trimestral.

El concejal socialista Vicent Sarrià acusó al gobierno del PP de "crear un consejo a su medida" en el que "se restringe el derecho a la participación de los sindicatos y de los grupos de la oposición".

Así se pronunció Sarrià tras la reunión del consejo de administración de la EMT en la que se aprobó la modificación de estatutos y en la que el PSPV votó en contra porque el PP "pretende eliminar la representación democrática" en esta entidad. El portavoz de EU, Amadeu Sanchis, por su parte calificó de "regresivo y antisindical paso atrás" la modificación de los estatutos.

La decisión de dejar fuera de los consejos de administración a los trabajadores llega pocos meses después de la firma de un nuevo convenio colectivo que puso fin a meses de protestas y que, a cambio de evitar despidos, recortaba los salarios. Precisamente, el portavoz de Compromís en el ayuntamiento, Joan Ribó, destacó que los trabajadores se han bajado el sueldo casi un 10 % mientras los directivos lo han hecho en la mitad (un 5,5%). Para Ribó, que también rechazó la modificación de los estatutos, se trata de un gesto de insolidaridad por parte de la alta dirección.

Por su parte, la empresa aseguró que la relación con los representantes sindicales "va a seguir siendo igual de correcta y fluida como siempre".

Diez millones menos de aportación municipal

El consejo de administración de la EMT celebrado ayer dio cuenta de la memoria de gestión y de las cuentas de 2012. El Ayuntamiento de Valencia ha aportado durante 2012 un total de 56 millones de euros a la empresa, lo que supone 10 millones menos que en 2011 y que, según fuentes municipales, es fruto del "esfuerzo conjunto" por parte del consistorio, la dirección y los trabajadores en la aplicación de "políticas de ahorro y de ajuste presupuestario". Entre estas está la reducción de salarios que, según la EMT, se ha situado en un 8,6 %. El concejal socialista Pedro Sánchez destacó las deudas de cinco millones de euros de la EMT con empresas asociadas. El portavoz de EU, Amadeu Sanchis, por su parte destacó la pérdida de viajeros (de 4,3 millones a 3,8) y el recorte en varias líneas.