El plan de protección de los bienes de interés cultural del centro histórico prevé la construcción de un mirador turístico para contemplar las cubiertas de la catedral en el edificio de nueva planta y uso educativo-cultural proyectado en el solar degradado anexo a la casa del Relojero. El citado plan, que está tramitando la Concejalía de Urbanismo, también propone que se habiliten en el edificio, que tendrá un máximo de tres alturas, tiendas de artesanía. Como se ha publicado la decisión de urbanizar el solar anexo a la Casa del Relojero ha dado por zanjado un largo conflicto urbanístico entre la Conselleria de Cultura y el Ayuntamiento de Valencia que ha permitido, además, salvar la casa del Relojero, que será restaurada. El ayuntamiento, no obstante, no renuncia del todo a su proyecto de crear una plaza, en demanda de las peticiones de algunos vecinos, en parte del solar anexo a la casa del Relojero. Así, en el plan de protección de monumentos prevé que la parte trasera del edificio se dejará libre, se destinará a uso público y podrá ajardinarse.

Colectivos como la asociación Paco Leandro y el restaurador de la catedral han apostado por recuperar la trama histórica de la calle Micalet y el entorno de la Catedral. h. garcía valencia