El candidato de Ciudadanos (Cs) a la alcaldía de Castelló, Alejandro Marín-Buck, se ha comprometido a invertir un millón de euros anuales en la Marjaleria para acondicionar sus infraestructuras y mejorar sus servicios, como acondicionar el asfaltado irregular, adecuar la iluminación y solucionar las filtraciones.
«Todo esto, hasta normalizar su situación legalmente», dijo. Asimismo, Marín-Buck añadió que «tendremos una persona de enlace Gobierno-Marjaleria para tener un mejor feedback entre vecinos e institución y poder atajar en primera instancia sus necesidades e inquietudes».
El alcaldable de Cs se refirió en estos términos tras mantener una reunión con los representantes afectados de la Marjaleria y ha escuchado sus reivindicaciones, al mismo tiempo que les ha trasladado sus propuestas para darles soluciones «reales».
Marín-Buck, en primer lugar, aclaró que «en Ciudadanos no vamos a engañar a nadie» y que junto a los técnicos y asesores jurídicos «vamos a poner fin a tantos años de promesas incumplidas».
El candidato de Cs manifestó que «no vamos a consentir que vecinos que pagan sus impuestos como cualquier castellonense de primera reciban servicios de tercera porque creemos que desde la legalidad y de forma progresiva lo podemos conseguir».
Además, Marín-Buck visitó IPLA, una empresa «reconocida» de Castelló en I+D+i y» afectada» por el PGOU del Pacte del Grau «que reduce el 70 por ciento del suelo industrial y queriendo crecer, se ve obligada a abandonar la capital de la Plana para ubicarse en otro municipio».
El alcaldable de Cs ha concluido que «no podemos dejar marchar el trabajo de Castelló, ni que empresas como estas de expansión dejen de contribuir a nuestro ayuntamiento. A quien genera empleo y oportunidades, en Cs le pondremos alfombra roja», concluyó.
Cabe recordar que la alcaldesa, Amparo Marco, mantuvo recientemente una reunión con vecinos de la Marjaleria en la que aseguró que tras el último cambio en la Lotup tienen garantizada la continuidad la mayoría de las viviendas de la zona. La zona también está pendiente de la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad para la regularización definitiva de la zona, una cuestión que no consiguió con el plan especial del año 2006.