Los festeros del Puig renuncian a las ratas en las cucañas por miedo a las multas
Los festeros de Sant Pere Nolasc del Puig anunciaron ayer su decisión de no incluir ratas muertas en el interior de las cucañas que los quintos romperán mañana domingo por la tarde en la tradicional "trencà de perols".
Los organizadores de la fiesta señalaron que su postura es favorable "a mantener la tradición de las ratas, tal como se ha hecho durante muchos años", pero no quieren asumir posibles sanciones económicas después de que el partido animalista Pacma pusiera sobre aviso al gobierno autonómico del presunto uso de roedores vivos.
"Este año no hemos conseguido ninguna rata, pero aunque tuviéramos, los festeros hemos decidido que, al menos por nuestra parte -matizó uno de los festeros-, no habra ratas en las cucañas".
Un portavoz de los organizadores subrayó que, aunque ellos renuncian al uso de animales, no podrán impedir si alguien ajeno a la organización lanza alguna. "Allí se reúnen más de 500 personas y nosotros no somos policías para estar vigilando a todo el mundo. Sólo podemos garantizar que por nuestra parte no habrá ratas", afirmó.
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