Un día de fuego. La realidad superó ayer la predicción climatológica al alcanzar, por primer vez en la historia de los registros meteorológicos que datan de hace más de cien años, los 43º C de máxima en la ciudad de Valencia que se registraron a las 16,30 horas.
"Es la más alta que ha habido nunca en el registro de Valencia", declaró a Levante-EMV el jefe del Grupo de Predicción de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) en Valencia y Murcia, Victor Alcover.
La intensidad y la uniformidad con la que se manifestó ayer el viento del Poniente dejó tras de sí una jornada con máximas de 42º C en la mayor parte del territorio valenciano. No obstante, el valor más alto, como casi siempre, se registró en la localidad de Xàtiva donde supearon los 44º. De ahí que durante los últimos días los propios setabenses se autodefinan como "rustits", además de "socarrats".
El Poniente comenzó a penetrar sigilosamente durante la tarde del jueves en las zonas del interior, donde las temperaturas comenzaron a elevarse de forma persistente como si el mercurio estuviera agitado por la prisa pero fue en la mañana de ayer cuando por fín el viento del Oeste comenzó a enseñar sus caloríficas garras.
De hecho, a las 8,30 de la mañana y anticipándose a lo que iba a suceder el Grupo de Predicción de Valencia decretó la alerta roja en la Comunitat Valenciana. Era la primera vez que se adoptaba una decisión de ese calibre en los seis años del Plan Nacional de Avisos y el objetivo decisivo era orientar a Protección Civil para que dispusiera el arsenal de medidas preventivas para acotar el riesgo de incendios, ya que a mediodía el termómetro de Viveros ya marcaba los 41º, una cifra que anticipaba valores aún mayores, como se confirmó solo unas horas más tarde.
El fenómeno climatológico se producía simultáneamente en toda la C.Valenciana, a excepción de la comarca de Els Ports en Castelló y una pequeña franja del litoral entre Gandía y Oliva que osciló entre los 36º y 38º aunque en Cullera sí se superaron los 40º. En el resto de comarcas como La Vall d'Albaida, la Costera, la Ribera, la Olla de Buñol, L'Horta, el Camp del Turia y el Camp de Morvedre el mercurio sobrepasó los 40º y cabalgaba con total impunidad por encima de los 42º, un fenómeno que se prolongó de 4 y 5 horas.
Al sur de la Comunitat, las comarcas de la Vega Baja y el Baix Vinalopó llegaron a a los 44º.
Un agosto que pasará a los anales del clima
El presidente de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Ricardo García Herrera, advirtió que ayer fue el día "más complicado" de la ola de calor que azota España desde el jueves, para toda la zona sur, sureste y levante peninsular, donde se eleva el riesgo de incendios.
La Agencia Estatal de Meteorología elevó a alerta roja (riesgo extremo) a Valencia, Alicante y Murcia desde las 14.00 a las 19.00 horas de ayer, por altas temperaturas que alcanzaron máximas de 42 y 44 grados.
El meteorólogo destacó que esta ola de calor es "relativamente inusual", ya que se suelen registrar entre mediados de junio y agosto. "Eso hará que seguramente el mes de agosto sea de los más cálidos en los registros históricos", recalcó.
La predicción para hoy indica que la temperatura en la ciudad de Valencia caerá unos díez grados y que las máximas podrían rondar los 30º, ya que el Poniente desaparecerá durante la noche.
En el resto de la Comunitat Valenciana se espera una caida entre moderada (de seis grados) a notable (de seis a diez grados), según anunció la delegación de Aemet en Valencia.
